River Plate, golpeado tras una decepcionante actuación en la ida de los octavos de final de la Copa Libertadores, intentó una recuperación en su visita a Huracán por la sexta fecha de la Liga Profesional, pero nuevamente decepcionó, siendo derrotado por 3 a 2. El equipo de Marcelo Gallardo presentó mayoría de suplentes en el estadio Tomás Adolfo Ducó, con arbitraje de Fernando Rapallini
El elenco alternativo de la Banda se encontró con un dueño de casa que propuso un juego físico, presionándolo bien arriba y apostando a un juego directo, con Garré por momentos cerrándose para liberar el pasaje por su carril. La visita, en tanto, logró conectar cuando Juanfer Quintero hallaba socios, como ocurrió a los dos minutos, cuando se combinó con Palavecino, quien remató con el pie abierto y su intento se fue apenas ancho.
Pero fueron los de Dabove los que mejor se sintieron en el diagrama del encuentro. Coccaro se reveló como un rival incómodo para los defensores y había estrellado un remate en el palo, aunque estaba en fuera de juego. Su movilidad y accionar de espaldas les generaban dolores de cabeza a los defensores.
El que peor la pasó fue Jonatan Maidana. Tras disputar un balón con el uruguayo contra el lateral a los 28 minutos, el delantero lo sujetó desde el césped. Y el central giró y, en el afán de sacárselo de encima, lo impactó con su brazo. El VAR convocó a Rapallini quien, tras revisar en la pantalla, le mostró la tarjeta roja.
Como agravante, a los 36′ a Armani (que venía de sacarle una chance clara a Cristaldo) se le escapó un centro, volvieron a meter el balón al área y Galván, con un tiro seco, anotó el 1-0 para el Globo.
Tanto River como Gallardo cambiaron en el inicio del complemento. El DT tocó la zona más floja de la etapa inicial e hizo ingresar a Barco y Paradela por Pochettino y Simón. El orientador cambió el semblante, se lo vio más activo, dando indicaciones. Y el equipo asumió la iniciativa, se hizo dueño del cotejo, a partir del hombre más regular de la alineación: Palavecino. Hasta tres cuartos avanzó con criterio la visita, pero le faltaba peso ofensivo. En consecuencia, el Muñeco mandó al campo a Julián Álvarez por Beltrán.
Pero el golpe fue otra vez de Huracán, con la colaboración de la defensa millonaria. A los 17′, Galván lanzó un pelotazo largo, Cristaldo se llevó el balón con el taco entre los centrales, Gudiño cedió y el ex Boca rubricó la corrida con un toque a la red: 2-0.
Seis minutos después, River volvió a creer. González Pirez aprovechó un centro desde la derecha que fue peinado en el primer palo y acercó al Millonario en el marcador: 2-1. Pero el mismo que le puso suspenso al score se encargó de quitárselo. Es que, a los 24, Rapallini sancionó penal del ex Estudiantes a Coccaro. La duda quedó flotando en el aire: ¿fue falta del defensor o el delantero se dejó caer?
El juez no dudó y el VAR avaló, dado que no lo convocó a observar la pantalla. Cristaldo cruzó el remate y vulneró la estirada de Armani, que apostó a que iba a tirar al otro palo: 3-1.
