• Dólar
  • BNA $899 ~ $899
  • BLUE $1025 ~ $1025
  • TURISTA $1438.4 ~ $1438.4

16 C ° ST 15.71 °

Unión Radio 91.3 en vivo

Las graves consecuencias de no llegar a un acuerdo con el FMI

Francisco Hauser

05 Enero de 2022 20.45

La Argentina enfrenta un problema de extrema gravedad. No llegar a un acuerdo con el FMI va a tener consecuencias graves para la actividad económica en general y, por lo tanto, para la vida diaria de todos los argentinos. Insistir en condiciones que el Fondo no va a aceptar no es, por lo tanto, una buena opción.

El ministro Martín Guzmán ha demostrado una gran impericia en el manejo de la deuda, producto de su condición de académico que ha estudiado y sugerido soluciones que, en el orden académico son novedosas, pero que nunca se experimentaron en la práctica.

Su obstinación académica lo lleva a cometer errores infantiles que ya han tenido consecuencias graves y que, de persistir, las tendrán aún más en el futuro. Debería entender que una cosa es escribir un papel y otra es jugar con la vida de millones de personas. 

Primer error, su pertinacia en demorar el acuerdo con los acreedores privados, alterando, además, el orden de negociación, cuando lo normal es acordar con el Fondo primero y luego negociar con los privados. Fue así que lo único que logró fue un diferimiento del capital sin ninguna quita. Dentro de un par de años enfrentaremos los mismos vencimientos que postergamos.

Segundo error, demorar dos años la negociación con el Fondo, perdiendo la ventaja que hubiera logrado al negociar durante la pandemia, momento en que hubiera estado mucho más proclive a un acuerdo. 

La postergación en la negociación con los privados implicó, además, el pago de al menos 5.000 
millones de dólares de vencimientos que se podrían haber evitado.

Es claro que la negociación fue un fracaso, ya que no hay antecedentes de un país que renegocie
su deuda si su riesgo país sube. Son errores propios de un equipo amateur, o de un equipo 
engolosinado con sus propias recetas.

Ahora bien, ¿qué es lo que pide el Fondo? Nada mas que un plan serio, que incluya un creíble sendero fiscal, monetario y cambiario. Todo lo demás es saraza, como le gusta decir al ministro. 

La reunión de los gobernadores de hoy y, el nivel de las preguntas, demuestra la baja calidad de  nuestros dirigentes. Los problemas están clarísimos: alto déficit fiscal financiado con emisión monetaria que, automáticamente, se traduce en inflación, combinado con una distorsión insostenible de precios relativos, principalmente, en dos precios relevantes: las tarifas de los servicios públicos y el tipo de cambio oficial. 

Es notable cómo nuestros representantes ni siquiera se toman el trabajo de estudiar procesos históricos recientes, como la negociación de la deuda con el FMI durante el gobierno de Raúl Alfonsín. Los problemas eran los mismos y la dinámica de la negociación parecida. El empecinamiento del ministro Bernardo Grinspun hacía imposible cualquier entendimiento. Solo al tomar control de la situación el ministro Juan Vital Sourrouille, con la asistencia de un equipo notable integrado, entre otros por Canitrot y Machinea, se logró destrabar la situación.

El ministro Guzman ya demostró no estar a la altura del desafío. Envió un proyecto de presupuesto al Congreso plagado de errores y mentiras que estaba condenado a ser rechazado, no logra controlar ninguna de las variables económicas y, en el área que teóricamente era su expertise, como es el tema de la deuda, se empecina en proponer recetas que solo funcionan en sus papers.

A esto se suma un grosero error geopolítico, no ya de Guzmán, sino de todo el Gobierno. Necesitan el voto de Estados Unidos y no hacen mas que tomar partido, en todos los foros, por las más extremas posturas antiamericanas. Si insistimos por este camino, no hay dudas que vamos mal.