La búsqueda de la felicidad es lo que todas las personas aspiran en su vida y gracias a Arthur C. Brooks, científico social y profesor en la Universidad de Harvard, conseguirla es posible.
Aunque, el catedrático le dio un vuelco a la cuestión y reveló que no se debe aspirar a ella como un destino, sino como una forma de vivir la vida.
Brooks dedicó años al estudio de la búsqueda de la felicidad y llegó a la conclusión que existen “macronutrientes de la felicidad”: disfrute, satisfacción y propósito.
Cuáles son los “macronutrientes de la felicidad”
- Disfrute: Según Brooks, esto traspasa el placer momentáneo. Él se refiere a este punto una “experiencia más rica y duradera” tanto en compañía como en soledad, como leer un libro, dar un paseo o ver una película.
- Satisfacción: A diferencia de muchos autores, Brooks propone que la verdadera satisfacción se obtiene luego de pasar por desafíos y tras superar obstáculos. “Nosotros, como humanos, necesitamos luchar, esforzarnos, sacrificarnos, incluso necesitamos dolor en nuestras vidas, porque eso es en realidad cómo ganamos algo”, explicó.
- Propósito: Este último concepto, pero no menos importante, el catedrático lo define como una mezcla de coherencia, finalidad y significado. Esto quiere decir que la existencia del ser humano debe tener una dirección y sentido más profundo. “El propósito de mi vida es compartir los secretos de la felicidad” o “estoy aquí para difundir el amor en abundancia”, son ejemplos que reflejan cómo un propósito claro puede guiar nuestras acciones y elecciones diarias hacia un bien mayor.