“Me sentí como la persona más horrible, dejando a alguien porque tiene cáncer, pero estaba dañando mi salud mental y no estaba ayudando a Jelle”. Así comenzó el relato de Danielle Epstein, de 32 años, sobre la decisión que tomó en su pareja.

Todo comenzó cuando la pareja estaba buscando una casa para comprar en Palmers Green, al norte de Londres, y Jelle comenzó a tener vómitos y mareos. El hombre fue al médico, se realizó distintos estudios y se le encontró un túmor de meduloblastoma de grado 4. Esta situación afectó muchísimo a la relación entre ambos.

“Estaba tan preocupada y devastada que no podía dormir ni comer. Estaba teniendo ataques de pánico y estaba tomando tantos medicamentos para resolverme que simplemente no podía funcionar”, contó Epstein.

Ante esto, la mujer decidió dejar a su pareja, quien estaba en luchando contra la enfermedad. “Me sentí tan impotente al ver todo esto desarrollarse, así que supe que tenía que hacer algo”, comentó.

Danielle terminó su relación con Jelle, pero decidió correr maratones en su honor para ayudar a juntar fondos para el estudio del cáncer: “No soy una corredora, pero él ha corrido maratones antes, así que pensé que sería un desafío para mí y un buen tributo para él y lo sentí como algo a lo que apuntar”.

El hombre, quien continúa en su lucha, reflexionó: “Estaré allí el día para animar a Danielle. Creo que es increíble lo que está haciendo. Cuando dijo que iba a hacer una maratón, debo admitir que tenía mis dudas. Creo que solo hizo unos 5 km cuando estábamos juntos y eso fue con muchas quejas. Tengo mucho respeto por su disciplina y perseverancia”.

La joven de 32 años cerró: “Todavía amo profundamente a Jelle y quiero apoyarlo, pero me di cuenta de que no podía quedarme con él como su pareja”.