Dos niños de 10 y 12 años de edad, que jugaban en la plaza de su barrio, fueron víctimas a plena luz del día del arrebato de sus teléfonos celulares. 
Según se desprende de la denuncia realizada por los padres de las víctimas, en la Unidad Judicial N° 5, el ilícito ocurrió el domingo a las 16.30 aproximadamente, en la plaza del barrio Fray Mamerto Esquiú, en la zona alta de la ciudad.  
Las víctimas, dos niños de 10 y 12 años, se encontraban sentados en una de las bancas de la plaza, jugando con sus teléfonos celulares, cuando se les acercaron tres adolescentes, de 14, 16 y 17 años. Los mencionados, empleando violencia sobre las criaturas, los despojaron de sus teléfonos para luego darse a la fuga. Mientras huían, la Policía fue alertada del ilícito, logrando un móvil que recorría preventivamente la zona divisar a los supuestos autores del ilícito y arrestarlo. 
El hecho fue puesto en conocimiento del fiscal especializado, Guillermo Narváez, quien impartió las directivas a seguir.