El conocido musico cuartetero local Cristian Coronel comenzó desde hoy a ser juzgado en la Cámara Penal N°1, por más de una veintena de hechos en contexto de género. La víctima, su expareja, es una joven que lo denunció de manera sistemática cada vez que el músico la agredía físicamente, la amenazaba y coaccionaba su libertad.

Abierto el debate que es llevado adelante por el juez Fernando Esteban, de manera unipersonal, el imputado sentado en el banquillo de los acusados escuchó la lectura de cada uno de los 21 hechos por los que llega a juicio. Episodios de amenazas, lesiones, coacción con arma de fuego, daños, todos cometidos en los últimos cinco años de los que fue víctima su ex pareja y madre de sus hijos.

Luego de escuchar las acusaciones y las pruebas en su contra, el juez Esteban le preguntó a Coronel si iba o no a prestar declaración.

Asesorado por su abogado defensor, el Dr. Juan Pablo Morales, el músico dijo abstenerse de prestar declaración.

A renglón siguiente, por secretaría, se dio lectura a la declaración que efectuó el acusado cada vez que era imputado de un nuevo hecho delictivo.

En algunas de las causas, al momento de intimarse el nuevo hecho, Coronel se abstuvo de declarar y, en otros, dio su versión. Básicamente, acusaba a su expareja, que era la víctima que lo había denunciado en varias ocasiones, pero que nunca la justicia había hecho nada.

Cuarto intermedio

Tras concluir la lectura de las declaraciones, el juez resolvió pasar a un cuarto intermedio para mañana a partir de las 9 de la mañana, cuando dará inicio la ronda de testigos.

Para la audiencia, la segunda del plenario, está previsto que presten declaración cinco testigos propuestos por la defensa, entre ellos, la víctima.

Luego será el turno de los testigos propuestos por la defensa del imputado.

Brevemente, los hechos de los que se le acusan a Cristian Coronel, quien llega privado de la libertad, alojado en el servicio penitenciario provincial, ocurrieron en los últimos cinco años. En una oportunidad fue a la casa de su expareja, quien convive con sus hijos, y le pegó golpes en la cabeza, le rompió el teléfono celular y la amenazó, diciéndole “no vaya a ser cosa que me entere que andás con otro porque te voy a matar”. 

Todos los hechos investigados por las diferentes fiscalías fueron calificados en contexto de violencia de género.