Fieles a la vocación comunicadora de la Iglesia, y animados por el lema “Comunicadores de la Esperanza”, el sábado 1 de junio, referentes de la Pastoral de Comunicación Social del NOA se reunieron en San Miguel de Tucumán, para reflexionar, trabajar, compartir y proyectar acciones conjuntas de evangelización en la Región desde una identidad propia con fuerte impronta mariana.
Fueron anfitriones de este encuentro fraterno el Arzobispo y el Obispo Auxiliar de Tucumán, Mons. Carlos Sánchez y Mons. Roberto Ferrari, respectivamente, quienes acompañaron cada momento vivido, con la coordinación de la Hna.
Silvia Somaré, de las Esclavas del Sagrado Corazón de Jesús, entusiasta comunicadora que viene impulsando la pastoral orgánica en comunidades del NOA, acompañada por un grupo de jóvenes motivados por esta corriente de gracia en el ámbito de la comunicación.
Participaron representantes laicos de Tucumán, Concepción, Salta, Jujuy, Humahuaca, Añatuya, La Rioja y Catamarca; y el padre Germán Maccagno, de Jujuy. Las diócesis que no pudieron estar presentes, como el caso de Cayafate, Orán y Santiago del Estero enviaron videos con mensajes y se unieron a través de la oración. Todos llegaron con sus patronas o patronos, destacándose la presencia de la imagen peregrina de Nuestra Madre del Valle, Patrona del NOA.
El escenario para esta reunión fue el Arzobispado de Tucumán, en cuya capilla se dio inicio a la jornada con la Adoración al Santísimo Sacramento, en vísperas de la Solemnidad de Corpus Christi. Este profundo momento de espiritualidad ante la presencia del Señor estuvo a cargo de la Diócesis de Jujuy,
Con gratitud se escucharon las palabras de bienvenida de Mons. Carlos Sánchez, referente de la Pastoral de Comunicación del NOA, quien seguidamente encabezó la procesión con las reliquias del Beato Carlo Acutis, joven eucarístico y comunicador que pronto será canonizado. Entre cantos y con la alegría por el encuentro, los participantes se dirigieron hasta la sala de conferencias.
En la primera exposición, la Hna. Silvia Somaré abordó de manera amena “El ser y el hacer de la Iglesia” y su vocación de comunicadora, con sus luces y sombras. Destacó la importancia de reconocernos discípulos misioneros respondiendo a la génesis de la Iglesia expresada en el mandato de Jesús a los apóstoles: “Vayan por todo el mundo y anuncien la Buena Noticia” Mc. 16,15. “Estamos llamados a ser peregrinos de esperanza, la esperanza que viene del Resucitado”, dijo.
Por la tarde fue el turno del padre Luis Zazano, de la comunidad Misioneros Digitales, quien se refirió a los “Samaritanos del Mundo Digital”, planteando los desafíos del uso de las redes sociales en el tiempo actual.
El sacerdote del clero tucumano compartió su experiencia en la transmisión de la Buena Noticia a través de estos nuevos instrumentos de comunicación, “samaritaneando, es decir acompañando al hermano herido”, expresó, a ejemplo del samaritano que se compadece del hombre golpeado que encuentra en el camino que relata el Evangelio. Reflexionó acerca de aquello que se debe madurar para 'samaritanear', teniendo en cuenta el propósito trascendente de la Iglesia orientado a la gloria de Dios; los valores compartidos, el sentido de pertenencia, la generación de vínculos, la seguridad en uno mismo y la motivación para caminar juntos como Región.
Además de las charlas, este espacio fue propicio para compartir experiencias del camino recorrido en el ámbito de la comunicación social. En este momento, miembros del Equipo de Comunicación de la Diócesis de La Rioja expusieron sobre el “Desarrollo y acompañamiento de los equipos de comunicación diocesanos”, a partir del camino andado hasta ahora, como aporte para tener en cuenta a la hora de sistematizar y darle identidad a la acción pastoral de la comunicación en las diócesis.
Fue clave el trabajo por grupos, mirando la realidad de cada una las Iglesias Particulares, a la hora de formular propuestas de acción pastoral en la Región, que después fueron expuestas en el plenario. Estos aportes serán sistematizados en un documento de trabajo.
El momento mariano ante la presencia de la imagen peregrina de la Virgen del Valle, Patrona del NOA, a cargo de la Diócesis de Catamarca, fue la síntesis de esta intensa jornada de trabajo, reflexión y fraternidad con el anhelo de ser peregrinos de esperanza. Así, dirigiendo la mirada y el corazón hacia Ella, cada uno expresó su compromiso escrito en un corazón de papel que luego fue colocado a sus pies. Este gesto culminó con un abrazo fraterno y la bendición de Mons. Roberto Ferrari.
