En la actualidad muchas personas sufren de cansancio crónico. Por momentos el descanso no parece suficiente y algunas personas lo padecen. Por eso, es necesario estar alerta ya que un cansancio extremo puede ser un síntoma de una enfermedad más seria pero que puede ser tratada.
La rutina diaria se torna agotadora por momentos. Por eso, es muy importante un correcto descanso para recargar energías y mantener la salud. Tanto el cuerpo como la mente necesitan recuperarse y el sueño cumple un rol fundamental en ese aspecto. Ahora bien, si no se logra un buen sueño o a pesar de todo, durante el día uno sigue cansado, es una señal de alerta.
Qué es el cansancio crónico
También conocido como fatiga crónica o síndrome de fatiga crónica (SFC), es una condición médica caracterizada por un cansancio profundo, persistente y debilitante que no mejora con el descanso. Además, va acompañado de otros síntomas que persisten en el tiempo. Padecerlo puede interferir significativamente en las actividades diarias de una persona.
A pesar de que se ha investigado ampliamente, aún no se comprende completamente la causa exacta de este síndrome. Se cree que puede ser el resultado de una combinación de factores, que incluyen problemas inmunológicos, infecciones virales, desequilibrios hormonales, estrés, predisposición genética y factores ambientales.
Cuáles son los síntomas
Este síndrome no es solo cansancio sino que incluye un conjunto de síntomas que lo caracterizan y ayudan a detectarlo. La Academia Nacional de Ciencias de EEUU establece que, para poder establecer el diagnóstico de fatiga crónica, los síntomas deben estar presentes al menos seis meses y con una intensidad moderada o grave. Algunos de los más frecuentes son:
- Malestar y agotamiento después de realizar un esfuerzo, ya sea físico o mental.
- Sueño no reparador.
- Deterioro cognitivo (pérdida de memoria, problemas de concentración).
- Síntomas como mareos relacionados con los cambios posturales (especialmente al pasar de estar sentados o tumbados a estar de pie).
- Dolor muscular y/o articular.
También existen otros síntomas menos frecuentes como el dolor de cabeza recurrente, dolor de garganta, y pueden verse afectados los sentidos al haber un aumento de la sensibilidad a estímulos externos como el sonido, la luz o los olores.
Cuál es el tratamiento del cansancio crónico
No existe una cura definitiva, pero los especialistas aconsejan a sus paciente con métodos adecuados a su caso con el objetivo de mejorar la calidad de vida. El tratamiento suele ser multidisciplinario y puede incluir modificaciones en el estilo de vida, terapia cognitivo-conductual, ejercicio moderado y medicamentos para controlar los síntomas. También, se recomiendan técnicas de meditación o relajación que ayuden a favorecer el desarrollo de un sueño de calidad.
Es importante destacar que el síndrome de fatiga crónica es una enfermedad real y debilitante, y puede tener un impacto significativo en la calidad de vida de quienes la padecen. Además, es necesario acudir a un médico para descartar otras enfermedades que pudieran tener síntomas parecidos.
