El brusco cambio de clima que se vivió en las últimas horas del martes en la provincia trajo aparejado algunos inconvenientes, tanto en viviendas como en espacios públicos. En este último caso, la lluvia vino a afectar nuevamente el interior de la Casa Natal de Fray Mamerto Esquiú.
Esto ocurrió anoche mientras se desarrollaba la presentación de la muestra pictórica del artista plástico Raúl Guzmán. La puesta, denominada “Raúl Guzmán 50 años con la plástica”, concentra una importante cantidad de obras producidas a lo largo de su carrera y en esta oportunidad la misma se trasladó al departamento Fray Mamerto Esquiú en adhesión a los actos por la Beatificación de Mamerto Esquiú.
Todo se desarrollaba con normalidad hasta que la lluvia, que no llegaba a tener mucha intensidad, comenzó a filtrarse en el interior del templete. La gala de la presentación en este punto se vio opacada por cuanto entre los cuadros y caballetes hubo que colocar baldes para contener el agua de las goteras.
Molestia y pesar
Conocida la noticia de lo sucedido en la noche del martes, los vecinos no pudieron evitar manifestar su malestar. A pocos días de celebrada la Beatificación, la Casa Natal viene a tener un valor aún más sagrado. “Cuidarla debe ser una urgencia”, comentó una vecina a Diario La Unión. Otra, en un posteo en las redes sociales cuestionó el manejo y el destino de los fondos municipales y sentenció: “Con tanta plata que se destinó, ¿no se pensó en el cuidado de la Casa?. Busquen los billetes que todavía no terminó la campaña electoral”.
“No puedo creer que con dos gotas que cayeron, ya volvamos a tener miedo de que algo le pase a la Casa de nuestro Padre Esquiú. ¿Cuándo van a hacer un trabajo en serio con el techo que se vive lloviendo?”, se preguntó Juana.
El mismo artista plástico, Raúl Guzmán se mostró sorprendido anoche. “Todo estaba bien y la lluvia era tenue pero después comenzaron a caer unas gotas en el interior. No pensamos que fuera a pasar a mayores pero a la vuelta si había muchas goteras”.
Obra sin respuesta
Lamentablemente lo de anoche no es una novedad. El año pasado, en noviembre y ante una lluvia un tanto más intensa que la de anoche, las trabajadoras de la Casa Natal junto con vecinas del lugar debieron escurrir el agua que había ingresado.
En aquel momento luego se apuntó a la directora de Patrimonio Histórico y Museos, arquitecta Laura Maubecín, quien ante la consulta de si habría arreglos en el techo del templete para evitar nuevas filtraciones, esta supo referir en esa ocasión que eso estaba “dentro del listado de obras y, seguramente, se comenzará en los próximos meses”.
El tiempo pasó, vino la beatificación de Mamerto de la Ascención Esquiú y la única modificación que se realizó al lugar histórico, fue en el exterior en función de brindarle una mejor vista para estar a tono con el acto histórico que se celebró el pasado sábado. Ahora si las lluvias persisten, el espacio que resguarda a la casa donde nació el Beato Esquiú, volverá a quedar a merced del descuido y el deterioro.
