Pobladores de la localidad de Huillapima, en el departamento Capayán convocaron a una manifestación para este lunes a las 6:00 horas frente a la delegación del Correo Argentino. 

Ello obedece a que tras el despido del único trabajador que prestaba servicios en la oficina postal local es que se determinó el cierre de la dependencia. Es por eso los vecinos se oponen a la medida toda vez que en la sucursal mencionada se abonan beneficios previsionales y sociales además de cobrar impuestos y servicios, entre otros trámites. 

Cabe recordar que el viernes cinco trabajadores catamarqueños del ente postal fueron cesanteados por el gobierno nacional. Uno de estos trabajaba hace 35 años en la sucursal de Valle Viejo, mientras que el otro cumplía tareas como empleado único en la sucursal que este lunes contará con el respaldo de la comunidad. 

Los nuevos despidos se suman a las cesantías y despidos voluntarios realizados en marzo. Al respecto Raúl Quijano, secretario general del FOECYT afirmó días pasados que: “Por ahora la empresa está haciendo acuerdos con aquellos compañeros que deseen irse y que están cerca de la jubilación. El problema es que no quedan empleados que estén en esa condición, entonces el miedo nuestro, como sabemos que el correo va directo a ser privatizado, es qué pasará en una segunda etapa”. 

Por tanto, lo que sucede en Catamarca se relaciona directamente con el ajuste de personal que lleva en esta empresa el Gobierno nacional.  

Las cesantías, que se calculan en al menos 200 desde este viernes, abarcan a todo tipo de personal independientemente de sus años de antigüedad, tareas y funciones y se conoce que en los próximos días continuarán llegando los telegramas a los domicilios de los trabajadores. Son casos que oscilan entre los 15 y 30 años de antigüedad en el servicio postal de sedes de la Ciudad de Buenos Aires, provincia de Buenos Aires, Santa Fe, La Pampa, Catamarca, Tucumán, entre otras.