A poco más de 48 horas del macabro hallazgo en la planta de residuos de la Capital, el personal de la División Homicidios de la Policía de la provincia continúa trabajando arduamente en procura de recolectar datos y pruebas que le permitan establecer cómo llegó el viernes a la noche el bolso con el cuerpo de una niña, quien nació con vida, de poco más de siete meses de gestación, a uno de los sectores de la planta de residuos en el sur de la ciudad Capital.
LA UNIÓN pudo conocer de voceros de la causa que la investigación es compleja, partiendo del lugar donde fue hallado el cuerpo ya sin vida de la bebé, de quien la autopsia practicada el sábado al mediodía en la morgue judicial estableció que se trataba de una niña, quien nació con vida, y luego, fue asesinada.

Según explicaron, la planta de residuos cuenta con varios montículos, por denominarlo de alguna manera, donde son arrojados los residuos y basuras que se recolectan de toda la ciudad Capital. Ahora, si bien se logró establecer el lugar donde fue arrojado el cuerpo de la niña, ya que fue una trabajadora de la planta quien clasifica la basura, la que halló el bolso con el cadáver y dio aviso de inmediato a la policía, resta establecer cuál de los más de diez camiones que transportan al lugar diariamente los residuos fue el que trasladó el bolso.
Para determinar esta situación, desde el día sábado, luego de que se confirmara a través de la autopsia que se trató de un homicidio, ya que la niña había nacido con vida, los investigadores buscan establecer qué camión fue el que arrojó el bolso. Luego, tendrán que determinar cuál es el recorrido de recolección que realiza el camión y, por último, quiénes son los recolectores que trabajaron esa noche.

En paralelo a ello, los investigadores trabajan en otros aspectos de la causa que les permitan dar con la madre de la criatura, pero, hasta el momento, no se obtuvieron resultados al respecto. En cuanto a la bebé, se supo que la niña, como ya se dijo anteriormente, había nacido con vida y su cuerpo fue colocado en el interior de un bolso, el que fue arrojado a la basura y terminó en la planta de residuos, trasladado por uno de los camiones recolectores. 
El caso es investigado por la fiscal Jesica Miranda.