Tal como estaba previsto, ayer cerca del mediodía el juez correccional n°3, Javier Herrera, dictó sentencia en el juicio oral y público, iniciado la semana pasada en contra de Gonzalo Pacheco a quien declaró culpable y le impuso, entre otras medidas, que realice un curso de seguridad vial y cumpla tres horas semanales de trabajo comunitario en el hospital San Juan Bautista. Además, deberá pagarle en concepto de resarcimiento económico a la víctima, Maximiliano Aybar, más de siete millones de pesos.

El joven que ahora está condenado, pero no ira a la cárcel, debía responder por el delito de lesiones gravísimas, por haber provocado en diciembre de 2020, la amputación del brazo derecho de su amigo, Maximiliano Aybar, tras volcar el automóvil que conducía de manera imprudente y negligente.

La sentencia se dio a conocer luego de que, reanudada la audiencia, Gonzalo Pacheco se sentara ante el estrado y, haciendo uso de su última palabra, le pidiera perdón a su amigo, la víctima, por lo que había ocurrido, refiriendo que siempre estuvo junto a su familia a su lado y lo acompañó en lo que pudieron.

Sentencia

Tras el relato de Pacheco, quien había guardado silencio en el inicio del juicio, el magistrado se retiró a deliberar la sentencia, la que dio a conocer pasadas las 11:30 de la mañana. Con la presencia de las partes en el recinto, Herrera resolvió declarar culpable del delito de lesiones culposas gravísimas a Gonzalo Pacheco y condenarlo a la pena de dos años y ocho meses de prisión de cumplimiento en suspenso y cuatro años de inhabilitación para conducir cualquier tipo de vehículo automotor, tal como lo pidió el fiscal Víctor Figueroa en sus alegatos, la semana pasada.

Asimismo, el juez ordenó a Pacheco la realización de un curso de seguridad vial y que preste servicio comunitario sin remuneración alguna, por el lapso de dos años, tres horas a la semana en el hospital San Juan Bautista, además de abstenerse de consumir bebidas alcohólicas.

En el veredicto, el juez también se expidió en relación al pedido de la querella, condenando a Pacheco a pagar la suma de más de siete millones de pesos a la víctima por la gravísima lesión que le ocasionó su conducción imprudente, que lo dejó incapacitado en el cincuenta por ciento de su cuerpo para poder trabajar.

El hecho

Brevemente, en el mes de diciembre del año 2019 el ahora condenado conducía un automóvil junto a la víctima y una tercera persona, a alta velocidad, por avenida México y, al tomar la rotonda de avenida Virgen del Valle, perdió el control del rodado y volcó. Como resultado del dantesco siniestro, Aybar, quien iba en el asiento del acompañante, sufrió la amputación del brazo derecho.