La angustia que pasaron los empleados de Artex durante los últimos meses, por los salarios adeudados y la incertidumbre generada por la intención de los dueños de la empresa de cerrar la planta textil ubicada en el pantanillo, parece haber llegado a su fin. La semana pasada, una empresa de Buenos Aires que se dedica sobre todo al rubro de laboratorios concretó la compra de la textil y en el acuerdo se incluyó que los nuevos dueños se harían cargo de mantener la totalidad de la planta de empleados y de hacer frente a las deudas salariales. 
En declaraciones radiales, el ministro de Industria, Comercio y Empleo, Lisandro Álvarez prefirió no dar el nombre de la empresa hasta que el gobernador Jalil haga mención a eso y destacó que “invirtieron en 30 maquinarias, en materias primas y demás que son muy onerosas y más en esta época”.  
Si bien habrá una reconversión de la planta que hasta ahora solo producía indumentaria de trabajo, Álvarez mencionó que los compradores “tienen laboratorios y se han dedicado en el último tiempo a la confección de cuestiones sanitarias. Por ende, ante el aumento de la demanda de estos productos por la coyuntura decidieron arrancar con la fabricación de estos productos para luego, cuando todo esto se detenga poder continuar con lo que hacía antes ARTEX, entre otros productos”.  
Por último, tras destacar el impulso que dio el Gobierno provincial a las negociaciones, ofreciendo todas las herramientas con las que cuenta, para ayudar a los nuevos emprendimientos, el ministro remarcó que a pesar de las dificultades “pudimos lograr que esos 60 trabajadores de Artex pasen a la nueva empresa y respetándole su antigüedad”. 
Por su parte, el titular del Sindicato de Obreros de la Industriia del Vestido y Afines, señaló a LA UNIÓN que los operarios volvieron a trabajar el lunes y los nuevos daños ya pagaron una parte importante de las deudas salariales. Después de dos meses de tanta incertidumbre y angustia de los trabajadores que no tenían dinero, que llegue esta noticia es un alivio grandísimo.