Finalmente la Intersindical y el Ministerio de Trabajo, en representación del Gobierno provincial, firmaron el acuerdo salarial que estaba pendiente con el sector y esta manera ya no hay gremios que están por fuera de un aumento. El encuentro que se dio dentro de lo que es la última reunión de la conciliación obligatoria, inició a las 8 hs y resultó positivo para las partes, aunque no fue por unanimidad. Sobre el filo de los plazos para lograr incorporar las nuevas subas en las liquidaciones, el Gobierno nuevamente logró el entendimiento y evitó de esta manera que los gremios docentes llegarán a medidas de fuerza, posibilidad esta que ya había sido considerada como posible.

Las propuestas de aumento salarial del Ejecutivo del viernes pasado habían sido dos y tal lo adelantado, los gremios se inclinaron por la segunda opción. De manera que ahora y luego de la consulta a las bases, se aceptó un incremento al valor del punto índice vigente a enero de este año, equivalente al 40,45%. El incremento se distribuirá de la siguiente forma: en marzo una suba del 16,21% y el valor de punto índice ascendería a $133,61; en junio un 8,08% ($142,90), en agosto otro 8,08% ($152,19), y en septiembre otro incremento del 8,08% ($161,48). Esta propuesta se completa con la aplicación de cláusula gatillo por inflación a partir de octubre.

La negativa

El gremio de SUTECA había anticipado que se opondría a la firma del acuerdo, en tanto y en cuanto no se incluyó en el mismo la renuncia de la Subsecretaría de Reconocimientos Médicos, Dra. Analía Leiva de Ominetti, sobre quien pesan denuncias por maltrato a docentes. 

Juan Godoy, secretario general del sindicato, no se quedó solo con esta oposición sino que dejó plasmada la disconformidad indicando que “de forma coherente y consecuente con la Paritaria nacional y el principio de conciliación obligatoria, todos los gremios de la Intersindical Docente habíamos propuesto un paro de 72 hs por un 50% de aumento”. 

Mediante comunicado, el gremio adelantó que “seguiremos bregando por los incumplimientos paritarios y un salario que esté de acuerdo al costo de vida, que se proyecta en un 60%”. A renglón seguido marcaron que “lamentan que la estrategia del Gobierno sea jugar con la necesidad de la gente pero no queremos ser los responsables de la pobre futura de los salarios”.