Tras las denuncias cruzadas de una mujer de apellido Ruiz (43) y un hombre de apellido Pacheco, chofer de un colectivo de transporte de pasajeros, se conoció ayer un episodio de violencia inusitada.

De acuerdo al relato de una de las partes  -Ruiz- el hecho en el que a su entender puso en riesgo su integridad física, ocurrió el lunes a media mañana en una parada de colectivo de pleno microcentro de la Capital.  

A las 10.30 aproximadamente encontrándose en la parada de ómnibus de calle Chacabuco casi esquina Sarmiento, hizo seña a un colectivo de la línea 108 de la empresa 25 de Agosto, cuyo chofer -el otro denunciante, Pacheco- detuvo la marcha. Sin embargo, fueron varios los pasajeros que ascendieron y descendieron de la unidad quedando Ruiz tomada de la manija que está ubicada en la puerta de ascenso al colectivo  cuando de repente el chofer continuó con la marcha. Acción que llevó a la denunciante a perder el equilibrio y casi caer al suelo.  

Seguidamente, Ruiz abordó un remis y le pidió al chofer que siguiera al colectivo. La “persecución” se extendió hasta una de las garitas ubicadas en las inmediaciones del CAPE en donde el colectivo detuvo la marcha. Mientras descendían los pasajeros por la puerta de atrás, Ruiz se subió al colectivo por la puerta de adelante y comenzó a golpear al chofer en la cabeza, el rostro y el brazo delante de los demás pasajeros. Uno de ellos llamó a la policía debiendo uno de los uniformados al llegar ascender al micro y tranquilizar a la mujer quien luego denunció al chofer en la Unidad Judicial N° 3. Lo propio hizo el denunciado contra la violenta mujer.