Miles de fieles en Roma colmaron la Plaza de San Pedro este sábado durante la vigilia del Jubileo de la Espiritualidad Mariana, y en Catamarca comunidades, parroquias y fieles siguieron de cerca el mensaje del papa León XIV a través de transmisiones en vivo y encuentros de oración locales.
El pontífice presidió el rezo del rosario por la paz, instando a líderes y ciudadanos a "tener la audacia de desarmarse" y a abandonar la violencia como herramienta política, religiosa o ideológica. La jornada reunió delegaciones religiosas y familias frente a la imagen original de la Virgen de Fátima, traída desde Portugal para la ocasión.
En Catamarca, parroquias como la Catedral Basílica de Nuestra Señora del Valle organizaron vigilias y rezos comunitarios, replicando los Misterios Gozosos del Santo Rosario guiados por el pontífice en Roma. Los feligreses locales recibieron el mensaje de León XIV sobre la construcción de un futuro de paz basado en la justicia y el perdón, y la necesidad de compasión hacia los más vulnerables.
"La paz es desarmada y desarmante. No es disuasión, sino fraternidad; no es ultimátum, sino diálogo", enfatizó el papa, palabras que fueron compartidas y comentadas en las redes sociales de parroquias catamarqueñas, generando un sentido de comunión espiritual con la jornada en Roma.
Los sacerdotes de Catamarca destacaron la importancia del mensaje para los jóvenes y las familias de la provincia, invitándolos a replicar los valores de diálogo, reconciliación y respeto por la vida en sus comunidades locales. La imagen de la Virgen de Fátima, presente en la ceremonia central en Roma, fue un símbolo de guía y esperanza para los catamarqueños que se unieron en oración.
El Jubileo de la Espiritualidad Mariana reafirma su rol como llamada internacional a la paz y la reconciliación, y en Catamarca dejó una impronta de compromiso y reflexión sobre la violencia, la justicia y la solidaridad en la vida cotidiana.