Tanto la Navidad como el Año Nuevo son celebraciones que pueden afectar notablemente a tu perro, ya que son muchos los que no toleran la presencia de los fuegos artificiales. Para calmarlos, solo debes seguir una serie de consejos dados por los especialistas.
La pirotecnia asusta a los perros principalmente por su oído extremadamente sensible, que percibe sonidos a una intensidad mucho mayor que los seres humanos. Cada estallido se vuelve doloroso y abrumador.
Cómo evitar que tu perro se altere por la pirotecnia en Año Nuevo
Para evitar que tu perro se altere por la pirotecnia en Año Nuevo, debes crear un entorno seguro y aislado, y nunca sedarlo o medicarlo. Esto último es un error que muchos dueños cometen, y que lo único que hace es aumentar la sensación de miedo en el animal.
Lo ideal es proporcionarle a tu perro un espacio seguro y cómodo, donde el sienta que puede refugiarse. Por ejemplo, una habitación sin salidas al exterior o, en el caso de tenerlas, las puertas y ventanas deben estar cerradas.
Se recomienda sumar sus juguetes, agua fresca, comida y una cama o manta habitual para reforzar la sensación de seguridad en tu perro.
Ante la llegada de los fuegos artificiales en Año Nuevo, la recomendación de los especialistas es la de anticiparse y hacer ingresar a tu perro dentro de casa.
Además del aislamiento, son muchos los métodos que pueden emplearse para evitar que tu perro caiga en un estrés por la pirotecnia: música relajante para atrapar las explosiones lejanas o chalecos antiestrés son algunas de las más efectivas.
Qué puede experimentar un perro ante la pirotecnia
- Signos Físicos: temblores, jadeo excesivo, salivación, aumento de la frecuencia cardíaca y respiratoria, y, en casos extremos, parálisis momentánea o incontinencia urinaria.
- Conductas de Miedo: esconderse, vocalizaciones (lloriqueos, aullidos), temblores, posturas tensas con la cola entre las patas, conducta errante o paralización.
- Respuestas de Pánico: intentos de huida que pueden resultar en lesiones, escapes o pérdida del animal.
- Riesgos de Salud: las partículas químicas de la pirotecnia pueden causar intoxicaciones o agravar problemas respiratorios, sumado al riesgo de quemaduras o daños oculares.