El cargador de celular es esencial para el día a día, y cuando se rompe, el pánico suele apoderarse de nosotros, sobre todo si estamos fuera de casa o no tenemos acceso inmediato a uno nuevo. Afortunadamente, estos trucos sencillos y rápidos para intentar arreglarlo y salir del apuro.
Los mejores trucos para arreglar el cargador de tu celular
Con cinta aislante: Uno de los problemas más comunes en los cargadores es el daño en el cable, especialmente en las zonas donde se dobla con frecuencia, como cerca del conector o la base. Si tu cable está dañado y está interrumpiendo la carga, una reparación temporal puede ser posible utilizando cinta aislante.
Pasos:
- Localiza la zona del cable donde se ha producido el daño.
- Con cuidado, junta los extremos del cable si están parcialmente cortados.
- Enrolla la zona dañada con cinta aislante para restablecer la continuidad del cable. Asegúrate de que quede firme y que la cinta no se deslice.
Limpia el puerto de carga: A veces, el problema no está en el cargador, sino en el puerto de carga del teléfono. Con el tiempo, el puerto puede acumular polvo, pelusa o residuos, lo que impide una conexión adecuada y puede hacer que el cargador no funcione correctamente. Limpiar el puerto de carga puede ser una solución rápida y efectiva.
Pasos:
- Usa un palillo de madera o una brocha pequeña y suave para limpiar con delicadeza el interior del puerto de carga.
- Si tienes aire comprimido, sopla suavemente en el puerto para eliminar el polvo acumulado.
Proba con otro adaptador o cable: Si el cable parece estar en buen estado, pero el cargador sigue sin funcionar, el problema puede estar en el adaptador (el bloque que conecta a la toma de corriente). Prueba con otro adaptador compatible, si lo tienes a mano, para ver si eso soluciona el problema. A veces, el problema no está en el cable, sino en el adaptador que ha dejado de funcionar correctamente.
Reiniciar el teléfono o cambiar el modo de carga: Si todo parece estar en orden con el cargador y el puerto, pero tu teléfono no se carga, a veces un buen truco se esconde en el reinicio rápido puede solucionar el problema. Los problemas de software o configuraciones erróneas pueden interferir con la carga. Reiniciar el teléfono puede ayudar a restablecer su sistema y permitir que el cargador funcione correctamente.