El Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil dictó este viernes una serie de medidas cautelares contra el expresidente Jair Bolsonaro, en el marco de la causa que lo investiga por un presunto intento de golpe de Estado en 2022 contra el actual mandatario Luiz Inácio "Lula" da Silva.
Entre las disposiciones impuestas, se destaca el arresto domiciliario parcial del exmandatario, quien deberá permanecer en su domicilio desde las 19:00 hasta las 7:00, además de los fines de semana. También se le colocó una tobillera electrónica, se le prohibió utilizar redes sociales y se le impidió comunicarse con su hijo, el diputado Eduardo Bolsonaro. Asimismo, no podrá acercarse a ninguna embajada.
La causa involucra también a siete exfuncionarios cercanos a Bolsonaro, todos bajo investigación del máximo tribunal por su presunta participación en un entramado para desconocer los resultados electorales y forzar una interrupción institucional tras los comicios que dieron la victoria a Lula.
El proceso judicial ha provocado reacciones a nivel internacional. El expresidente estadounidense Donald Trump consideró que Bolsonaro es víctima de una "caza de brujas" y amenazó con imponer aranceles del 50% a las importaciones brasileñas si la justicia no rectifica su accionar. Desde marzo, Eduardo Bolsonaro se encuentra en Estados Unidos abogando ante funcionarios republicanos por una amnistía legislativa para su padre. Según afirmó, su gestión fue clave para influir en la advertencia arancelaria de Trump.
El portal France 24 informó que Bolsonaro fue trasladado a dependencias de la Policía Federal para la colocación del dispositivo electrónico. La sentencia definitiva del STF podría conocerse entre septiembre y octubre, según fuentes citadas por el diario O Globo.
Durante la mañana del viernes, la Policía Federal brasileña realizaba un operativo en la residencia del exmandatario en Brasilia, confirmaron medios nacionales e internacionales como France 24 y Reuters.