Un violento tiroteo sacudió este lunes por la tarde a la ciudad de Nueva York, cuando un hombre armado abrió fuego frente a un edificio de Park Avenue, donde funcionan las oficinas de la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL). El saldo fue de cuatro personas muertas, entre ellas un oficial de Policía, y cinco heridos. El atacante, identificado como Shane Tamura, de 27 años, se quitó la vida tras perpetrar la masacre.
Según informaron las autoridades, Tamura portaba una carta manuscrita de tres páginas en la que explicaba los motivos del ataque. El contenido del texto, revelado por la cadena CNN, indica que el joven había sido jugador de fútbol americano en categorías de formación de alto rendimiento y que atribuía su deterioro físico y mental a esa experiencia.
"El fútbol americano me provocó Encefalopatía Traumática Crónica (ETC) y me hizo beber litros de anticongelante", escribió Tamura. En el escrito también mencionó al exjugador de los Pittsburgh Steelers, Terry Long, quien fue diagnosticado con ETC y se suicidó en 2005. "No puedes ir en contra de la NFL, te aplastarán", afirmó, y concluyó con un mensaje dirigido a los investigadores: "Por favor, estudien mi cerebro".
Fuentes policiales señalaron que Tamura tenía antecedentes psiquiátricos documentados. Se presume que su objetivo era visibilizar las secuelas del ETC, una enfermedad neurodegenerativa asociada a impactos repetitivos en la cabeza, común entre exjugadores de fútbol americano.
La investigación del caso continúa bajo la órbita del Departamento de Policía de Nueva York (NYPD), mientras la conmoción por el ataque resuena en el ámbito deportivo y en la sociedad estadounidense.