El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció un aumento significativo en los aranceles a la importación como parte de su estrategia para fortalecer la economía estadounidense. La medida, que incluye incrementos del 25% sobre productos clave como aluminio, acero y automóviles, busca reducir la dependencia de importaciones y fomentar la producción local.
Durante su discurso en la Casa Blanca, Trump calificó la jornada como el "Día de la Liberación" y aseguró que estos cambios marcarán el inicio de una "nueva era de prosperidad" para Estados Unidos. Además, enfatizó que esta política ayudará a reducir la deuda y atraer más inversión al país.
El impacto de los nuevos aranceles en Argentina
Argentina, como uno de los principales exportadores de productos agroindustriales a Estados Unidos, se enfrenta a un escenario desafiante. Las barreras arancelarias pueden generar un aumento en los costos de exportación y afectar sectores clave como el de los metales primarios, el oil & gas y los alimentos procesados.
Uno de los sectores más afectados podría ser el de los productos agrícolas, especialmente el aceite de soja en bruto, cuya exportación a Estados Unidos alcanzó los 352 millones de dólares en el primer bimestre de 2025. Un incremento en los aranceles podría reducir la competitividad del país en este mercado y afectar a los productores locales.
Diferencias en la política arancelaria entre Argentina y EE.UU.
De acuerdo con un informe del Banco Internacional Goldman Sachs, existen grandes diferencias en las tarifas de importación entre ambos países. Mientras que Argentina aplica un arancel promedio del 6,4% a los productos provenientes de Estados Unidos, este último impone solo un 1,2% en promedio a las importaciones argentinas.
Si la administración de Trump avanza con su plan arancelario, Argentina podría verse obligada a renegociar acuerdos comerciales para evitar un perjuicio mayor en su balanza comercial.
Posible alivio para el sector del biodiésel
A pesar del impacto negativo en ciertos sectores, la política de Trump podría traer un beneficio para Argentina en la industria del biodiésel. Desde noviembre de 2024, Argentina negocia la eliminación o reducción de los aranceles antidumping aplicados a este producto desde 2017, lo que permitiría reactivar el comercio con EE.UU.
Antes de la imposición de estas restricciones, Argentina exportaba cerca de 200 millones de dólares en biodiésel al mercado estadounidense en 2016. Si se logra un acuerdo, esta medida podría compensar, en parte, las pérdidas en otros sectores exportadores.
Consecuencias en los mercados y el comercio exterior
La incertidumbre sobre la implementación de los nuevos aranceles ya ha tenido repercusiones en los mercados. En la plaza estadounidense, los futuros de aceite de soja experimentaron un alza de 38 dólares por tonelada, mientras que el poroto de soja registró ganancias de hasta 5,60 dólares por tonelada.
Para Argentina, esto podría traducirse en un aumento en los costos de producción y en la necesidad de buscar nuevos mercados para sus exportaciones. La administración del presidente Javier Milei deberá trabajar en negociaciones bilaterales para minimizar el impacto negativo de estas medidas.