“No bajamos los brazos” manifestaron con emoción Cristian y Nahuel Ortega, los hijos de Karina Verónica Chazarreta, quien salió de su casa el 11 de enero a la mañana y desde entonces se desconoce su paradero.
El día de ayer se realizó la segunda marcha de silencio para difundir la foto del rostro de Karina y exigir su aparición con vida. Familiares, y allegados marcharon desde la Plaza 25 de Agosto “La Estación” hasta la Plaza 25 de Mayo con carteles de con el rostro de Chazarreta y entregaron folletos con su información para difundir su búsqueda.
Al culminar la marcha en la plaza principal, Cristian Ortega, uno de los hijos de la mujer desaparecida, se quebró y se dirigió a los convocados con un sentido pedido: que la imagen de su madre se continúe difundiendo, y su rostro llegue a más personas, con la esperanza de dar con su paradero.
“Que toda la gente sepa que la estamos buscando, que no bajamos los brazos por mi mamá. El lunes vamos a hacer otra marcha para difundir su foto. Si pueden juntar más gente, se lo agradeceremos mucho” logró decir entre lágrimas el hijo de Chazarreta, mientras era contenido por quienes se encontraban en el lugar.
Cabe recordar que se emitió un alerta a través del Sistema Federal de Comunicaciones Policiales (SIFCOP) la cual elevó la información a todas las provincias, de forma ágil e inmediata, donde también tomaron participación áreas de la cartera de Seguridad a nivel nacional.
Mediante esta solicitud de búsqueda se encuentra en alerta toda las Policías Provinciales y Fuerzas Federales la cuales cuentan con la información personal de la persona que es buscada, con su foto correspondiente actualizada, más características físicas que ayuden a dar con el paradero de la misma.
Por otro lado, en la provincia se efectuaron rastrillajes y operativos en búsqueda de Karina. Incluso, en el marco de la investigación se detuvieron, por poco tiempo, en averiguación, a su ex pareja Cristian Ortega, quien contaba con una denuncia por amenazas hacia la mujer, y a su amiga, Edith Pintos.
Los investigadores, sin descartar ninguna hipótesis, presumen que la mujer reportada por su familia como desaparecida estaría con vida.
