En un episodio que pone de relieve los conflictos a los que se exponen diariamente los trabajadores del volante en la Capital, un hombre de 36 años terminó tras las rejas tras protagonizar un altercado por la tarifa de un servicio de transporte público. El incidente, caratulado inicialmente como un presunto fraude en la prestación de servicio, derivó en una rápida actuación de las fuerzas de seguridad locales.
Todo comenzó cuando un trabajador del sector, de 45 años de edad, quien se encontraba cumpliendo su jornada laboral a bordo de un automóvil Fiat Siena de color gris, aceptó un viaje solicitado por una persona del sexo masculino. Según el relato de la víctima, el trayecto se desarrolló con aparente normalidad hasta el momento de arribar al punto de destino solicitado por el cliente.
Una vez que el reloj taxímetro marcó el final del recorrido, se produjo el quiebre de la situación: el pasajero, lejos de abonar la suma correspondiente por el servicio prestado, manifestó su negativa rotunda a pagar. Ante la situación de desprotección y con el objetivo de evitar una escalada de violencia en la vía pública, el chofer decidió trasladarse directamente hasta la dependencia policial para solicitar auxilio.
El taxista se presentó espontáneamente en la base de la Comisaría Seccional Cuarta, ubicada estratégicamente en el sector oeste de la ciudad. Allí, el damnificado adujo los pormenores del suceso ante los numerarios de guardia. Según informaron fuentes policiales, el chofer relató que el hombre no solo se negaba a pagar, sino que persistía en su actitud dentro del radio de influencia de la unidad móvil.
Ante la veracidad del testimonio y la flagrancia de la falta, los uniformados procedieron de inmediato en el lugar. Siguiendo los protocolos de actuación, se efectuó la aprehensión del supuesto autor del hecho, un sujeto de apellido Anglat, de 36 años. El procedimiento se realizó sin que se reportaran incidentes mayores o resistencia física por parte del sospechoso.
Posteriormente a la aprehensión, los efectivos invitaron al trabajador del taxi a formalizar la situación mediante la radicación de la denuncia penal correspondiente en el Precinto Judicial N° 4. Este paso es fundamental para que la causa siga su curso administrativo y judicial, permitiendo que el Ministerio Público Fiscal cuente con las herramientas necesarias para la imputación.
El aprehendido fue puesto a disposición de la Fiscalía de Instrucción en turno del Distrito Oeste. Se espera que en las próximas horas se realicen las pericias de rigor y se determine si el sujeto cuenta con antecedentes previos por hechos similares. En el ámbito legal, este tipo de conductas suelen encuadrarse bajo figuras que protegen la remuneración del servicio, aunque la calificación final dependerá de las directivas impartidas por la fiscalía actuante.
Este tipo de sucesos reabre el debate entre los gremios de taxistas y remiseros sobre la necesidad de mayores medidas de seguridad y protocolos de pago en zonas críticas, especialmente durante los horarios nocturnos donde la frecuencia de estos altercados tiende a
