El expresidente Alberto Fernández negó nuevamente las acusaciones de violencia de género presentadas por su expareja, Fabiola Yáñez, tras su reciente declaración en Comodoro Py. En una entrevista con Perfil, cuestionó la imparcialidad del juez Julián Ercolini y del fiscal Ramiro González, asegurando que no están en condiciones "éticas" de llevar adelante el caso.
Negación de los hechos y crítica a los medios
Fernández rechazó las acusaciones de que le habría dado una patada en el estómago a Yáñez mientras ella podría haber estado embarazada. "En mi vida hice algo parecido a eso. No tengo la menor idea de cómo ocurrió", declaró. Además, acusó a los medios de comunicación de haber causado "un daño psicológico enorme" a su expareja con la difusión del caso.
El exmandatario calificó de "delirante" la versión de que habría golpeado a Yáñez mientras ella estaba en el suelo. Según él, su conducta no se condice con tales acusaciones, y argumentó que la falta de pruebas concretas refuerza su inocencia.
Conflictos en la convivencia y problemas personales
Fernández reveló detalles sobre su relación con Yáñez, mencionando que la convivencia en la Residencia de Olivos fue "buena, con problemas y dificultades", que vinculó con una presunta adicción al alcohol de la ex primera dama. Según su testimonio, esta situación generó tensiones y "momentos difíciles" durante su primer año en Olivos.
Uno de los episodios mencionados por el expresidente fue cuando Yáñez abandonó la residencia sin informar a la custodia. Fernández aseguró que en ese momento le indicó que no regresara y que se mudara a Puerto Madero. Sin embargo, tras reiteradas solicitudes de Yáñez a su entorno para interceder, accedió a permitir su regreso.
Cuestionamientos a la investigación judicial
El expresidente arremetió contra la Justicia, especialmente contra el juez Ercolini y el fiscal González. Afirmó que su relación con Ercolini pasó de ser de amistad a "profunda enemistad" y que el fiscal ha utilizado el caso para "tapar problemas propios". También sostuvo que la causa ha estado marcada por parcialidad y falta de pruebas concretas.
Entre sus críticas, Fernández destacó que su teléfono fue secuestrado durante la investigación, pero nunca fue analizado, mientras que Yáñez se negó a entregar el suyo. También cuestionó la falta de registros médicos o testimonios que respalden las acusaciones en su contra.
Las frases clave de Alberto Fernández
"No creo en la imparcialidad del juez y el fiscal ha usado esta causa para limpiar su imagen".
"Me dejaron sin respaldo de mis WhatsApp. Todo esto me pasó en esta causa".
"Ella tiene un problema de alcoholismo que en algunas etapas se pone muy violenta".
"Fabiola decía tener todas las pruebas en su teléfono, pero cuando se lo pidieron, se negó a entregarlo".