El próximo 9 de diciembre se definirá en quién recaerá la conducción de la Cámara baja provincial actualmente en manos de Cecilia Guerrero (Frente de Todos).

En principio los roces internos en el oficialismo que mantiene la mayoría, teniendo en cuenta que el bloque del Frente de Todos cuenta con 24 representantes y por lo tanto volverán a ocupar la presidencia. 

Las negociaciones están dadas por un lado el sector que ratifica el apoyo a Cecilia Guerrero  y piden que sea reelecta, otros proponen al exministro de Salud Ramón Figueroa Castellanos legislador que renueva su banca, mientras que otro sector propondrá al diputado electo Gustavo Aguirre. 

Tanto Guerrero como Figueroa Castellanos tienen un amplio consenso ya que responden al círculo íntimo de la senadora nacional electa y exmandataria provincial Lucia Corpacci. En tanto, el saliente ministro de Seguridad Aguirre responde directamente al gobernador Raúl Jalil. 

Según fuentes cercanas a LA UNION la reelección de Guerrero cobraría relevancia ya que dentro del corpaccismo cuenta con suerte de reconocimiento por su buen desempeño y la pluralidad de voces con ejes puestos en defensa de los derechos humanos y la perspectiva de género y diversidad. 

Por su parte, Aguirre ingresará a la cámara con una imagen positiva en marco de gestión frente a la cartera de Seguridad y con el apoyo del Jalilismo.