Catamarca conmemoró este martes 3 de junio el décimo aniversario del surgimiento del movimiento Ni Una Menos, una iniciativa que nació tras el femicidio de Chiara Páez, una adolescente de 14 años embarazada, asesinada en 2015 por su pareja. La brutalidad del crimen despertó una respuesta masiva de la sociedad y las instituciones, marcando un punto de inflexión en la lucha contra la violencia de género en el país.
Las actividades conmemorativas en la provincia comenzaron a las 18 horas con la iluminación del "Mural de la Memoria Ni Una Menos" en la avenida Galíndez, a metros de la avenida Mariano Moreno, con el objetivo de visibilizar y denunciar la problemática que, según registros oficiales, en la última década ha registrado más de 2.500 femicidios en Argentina.

Posteriormente, a las 19 horas, se llevó a cabo la marcha central, que partió desde el mismo punto y recorrió las calles céntricas de la ciudad hasta llegar a la Plaza 25 de Mayo. La movilización buscó no solo recordar a las víctimas, sino también exigir acciones concretas por parte de las autoridades para prevenir y sancionar la violencia de género en todas sus formas.
Este aniversario reafirma la importancia de la lucha y la protección de los derechos de las mujeres, así como la necesidad de fortalecer las políticas públicas para erradicar la violencia de género en la provincia y el país. El Observatorio de las Violencias de Género "Ahora que sí nos ven" registró un total de 2.827 femicidios a lo largo de estos 10 años, lo que implicó un femicidio cada 31 horas, y en ocho de cada diez casos, el femicida pertenecía al círculo íntimo de la víctima.
Caso de Chiara Páez
En detalle, Manuel Mansilla fue juzgado y condenado a 21 años de prisión por el asesinato de Chiara Páez. Ambos mantenían una relación de pareja que comenzó en octubre de 2014 y terminó en febrero de 2015, dos meses antes de que él la asesinara. El 9 de mayo de 2015, apenas unos días después de cumplir 14 años, Chiara se encontró con sus amigas y a medianoche fue a la casa de Manuel, como habían acordado, y estuvieron en el galpón ubicado en el patio de la vivienda.
Según reconstruyó el juez Adrián Godoy, Chiara fue atacada y se le hizo un corte de seis centímetros en el lado izquierdo del cuello con un cuchillo. Luego, Manuel la sujetó del cuello con una mano y de la cabeza con la otra, golpeándola contra el suelo y la mesa de trabajo del galpón hasta que dejó de moverse.
En febrero de 2022, la Corte Suprema de Justicia de Santa Fe anuló la pena de 21 años y 6 meses de prisión al femicida y ordenó que sea nuevamente juzgado por un tribunal de la Justicia de Menores. El fallo establece que corresponde una sanción por "tentativa de homicidio" debido a que Mansilla era menor de edad en el momento del brutal asesinato de Chiara.