Grave: maestra rural quedó atrapada en el cauce de un río en Fiambalá
Momentos de pánico en la soledad del campo vivió la profesora que casi pierde su auto y su vida mientras intentaba cumplir con su vocación de docente. Mirá el video.

Lo que debía ser una jornada laboral más para la profesora Alejandra Carrizo, terminó convirtiéndose en una pesadilla. En la mañana de este martes, cuando se dirigía desde Fiambalá hacia el Anexo 1 de la Escuela Secundaria Rural N° 25, en La Mesada de Zárate, su vehículo quedó atrapado en medio del caudal del Río Grande, en la zona denominada "La Herradura", una de las más inhóspitas del norte Fiambalense.

Lo que siguió fue un momento de terror y desesperación: sin señal de teléfono, sola en medio del campo y viendo cómo la creciente socavaba el suelo y hundía su auto, un Renault Logan blanco, la docente tuvo que tomar una rápida decisión para salvarse. Logró abrir las puertas, salir del vehículo y correr hacia una lomada en busca de una débil señal para pedir ayuda, esto según lo informado por Multimedios Abaucán.

Afortunadamente, su llamado fue atendido por la Secretaria del Anexo 3 de Punta del Agua, Prof. Olga Quinteros, quien de inmediato organizó un rescate. La vecina Anahí Vaquinzay puso a disposición su camioneta, y junto a la docente Lorena Carrizo y su pareja, se dirigieron de urgencia al lugar.

En un escenario crítico, donde el agua seguía subiendo y el auto se hundía más, las rescatistas no dudaron: una de ellas se metió al río y enganchó una linga bajo el vehículo para poder sacarlo. Luego de un arduo esfuerzo y en condiciones climáticas adversas, lograron rescatar el automóvil antes de que el agua lo arrastrara por completo.

 

Docentes abandonados

Este episodio no es un hecho aislado, sino una nueva muestra del abandono total en el que trabajan los docentes rurales en Fiambalá y en otros puntos de la extensa geografía catamarqueña. Recurrentemente se ha denunciado lo que sería la indiferencia del Ministerio de Educación respecto a las condiones y riesgos que deben afrontar cientos de maestros en el interior.

Ríos crecidos, caminos destruidos, temperaturas extremas, falta de agua potable, energía eléctrica e incomunicación total son parte de la realidad cotidiana de los maestros rurales, apuntan desde el medio fiambalense. El caso de la Prof. Carrizo expone la falta de asistencia en emergencias en esos lugares.

En exclusiva para Multimedios Abaucán, la profesora Alejandra Carrizo relató el dramático momento que vivió: "Fue un momento de desesperación, no saber qué hacer, sola, en medio del campo y sin señal. Abría la puerta del auto y entraba agua por todos lados. Logré salir y caminar buscando señal para llamar a la secretaria del Anexo III de Punta del Agua y pedir ayuda. Lamentablemente, de la delegación de Punta del Agua no se acercó nadie. Gracias a Anahí Vaquinzay, que llegó con su camioneta, y a la profesora Olga Quinteros, la maestra Lorena Carrizo y su marido, que empujamos con todas nuestras fuerzas hasta poder sacar el auto del agua".

 La profesora también destacó la incomprensión y las críticas injustas que sufren los docentes rurales: "Mucha gente nos juzga diciendo que no queremos cruzar el río por flojos o por no querer trabajar. Pero está claro que no es así. Todos los días intentamos llegar a nuestras escuelas, incluso arriesgando la vida. A veces el río parece pasable, pero no es lo que parece y suceden estos accidentes."

A pesar de la gravedad de lo sucedido, ninguna autoridad educativa se ha comunicado hasta el momento con la docente para solidarizarse o al menos interiorizarse sobre lo ocurrido.