Los docentes y no docentes universitarios realizaron este jueves una nueva medida de fuerza en todas las universidades nacionales. El paro convocado por el Frente Sindical de Universidades Nacionales fue en reclamo por la recomposición de los salarios y la ampliación del presupuesto educativo previsto para 2025. La medida se enmarcó en un "plan de lucha" que abarca también el avance de las tomas estudiantiles de más de 40 edificios de universidades públicas en todo el país.
Las protestas continuarán la semana próxima, con nuevos paros previstos para el lunes 21 y martes 22. Desde el Frente Sindical de Universidades Nacionales expresaron su respaldo a "las medidas de lucha que el movimiento estudiantil realiza actualmente en las 62 universidades públicas". A partir del 23 de octubre habrá clases públicas todos los miércoles a las 12 del mediodía frente al Congreso de la Nación.
"En noviembre vamos a realizar marchas regionales donde se van a establecer puntos de encuentro en distintos lugares del país para que la sociedad defienda la universidad pública y se realizará un encuentro federal universitario en la Ciudad de Buenos Aires", anticipó Jorge Anró, secretario adjunto de Fatun.
"El paro de los sindicatos docentes y no docentes está dentro del plan de lucha que está llevando adelante el conjunto de la comunidad universitaria. La medida tiene que ver con el rechazo al veto presidencial pero también con la discusión del presupuesto universitario de 2025 y, en el caso de los sindicatos, con un reclamo de apertura de paritarias libres, frente a una pérdida salarial del 50% en lo que va del año", dijo Carlos De Feo, secretario general de Conadu,.
El conflicto por el presupuesto educativo comenzó a principio de año y, desde entonces, se agudizó en las últimas semanas luego de que el presidente Javier Milei vetara la Ley de Financiamiento Universitario. Cuando la Cámara de Diputados ratificó el veto a la ley, los estudiantes empezaron a tomar las universidades públicas y el Frente Sindical profundizó su "plan de lucha", en acuerdo con la FUA y con respaldo del Consejo Interuniversitario Nacional, que nuclea a los rectores. Autoridades, sindicatos y estudiantes rechazaron los episodios violentos que se produjeron en algunas tomas, como en la Universidad de Quilmes. Según denunció la universidad, en la sede de Bernal hubo "infiltrados libertarios" que arrojaron gas pimienta a algunos estudiantes.
"Repudiamos las provocaciones y hechos de violencia que se han producido en algunas universidades, y que el gobierno nacional estimula con su campaña de difamación, estigmatización y mentiras dirigidas contra la universidad pública, y contra quienes ejercemos nuestro legítimo derecho a cuestionar una política de ajuste que pretende destruir un bien común que es fundamental para nuestra democracia", señalaron en un comunicado los gremios que integran el Frente (Conadu, Conadu Histórica, Fedun, Fagdut, UDA, CTERA y Fatun).