Grave episodio de racismo y abuso policial contra un ex jugador de Catamarca
El segundo partido entre Chamical Básquet y Atlético Chilecito terminó con fuertes denuncias por insultos y un procedimiento policial desmedido contra Mouhamed Sow. El basquetbolista fue esposado, trasladado a la alcaldía y retenido en condiciones irregulares.

El segundo partido de la serie entre Chamical Básquet y Atlético Chilecito, disputado en la provincia de La Rioja, derivó en un escándalo que dejó al descubierto profundas fallas en la seguridad del evento y una grave denuncia por racismo. El foco de la polémica recayó sobre el senegalés Mouhamed Sow, ex jugador de Hindú BBC de Catamarca y actual integrante del plantel de Chamical, quien fue víctima de insultos discriminatorios y de un accionar policial que su propio equipo calificó como abusivo y humillante.

El incidente se conoció a partir de una publicación de La Hora Deportiva, que relató lo ocurrido cuando Sow abandonaba el estadio tras la derrota de su equipo. De acuerdo con la crónica difundida en redes sociales, el basquetbolista fue increpado por presuntas autoridades del club local, quienes le habrían dirigido insultos de tinte racista, entre ellos la frase "negro de m...". La agresión verbal desencadenó la reacción del jugador, momento en el cual intervino personal policial que, lejos de calmar la situación, actuó de manera desproporcionada.

Según el relato, los efectivos procedieron a esposar a Sow y trasladarlo a la alcaldía local, tratándolo como si se tratara de un sospechoso de delito, pese a que el conflicto se había limitado a un intercambio verbal provocado por agresiones recibidas. Una vez en el lugar, ocurrió un hecho insólito: los policías no contaban con la llave para retirarle las esposas, lo que extendió innecesariamente la retención del deportista.

Durante ese lapso, la situación tomó un tinte todavía más absurdo. Según la denuncia, algunos policías intentaron sacarse fotos con el jugador, mientras permanecía inmovilizado, una conducta que profundizó la indignación del equipo visitante y expuso una falta total de profesionalismo y respeto hacia la integridad del deportista.

Lejos de resolverse rápidamente, la retención de Sow se prolongó aún más cuando representantes del club local se presentaron para realizar una contradenuncia, lo que demoró la liberación del jugador y mantuvo en vilo a todo el plantel de Chamical. Recién durante la madrugada el equipo pudo emprender el regreso, exhausto, conmocionado y profundamente afectado por lo vivido.

El hecho generó una inmediata reacción en el ambiente del básquet regional, donde se multiplicaron los pedidos de esclarecimiento y sanciones. Dirigentes, hinchas y referentes deportivos consideraron que lo ocurrido trasciende lo deportivo y plantea interrogantes urgentes sobre la seguridad en los eventos, el trato policial y, sobre todo, la persistencia de actos de discriminación racial en ámbitos que deberían promover inclusión y respeto.

Al mismo tiempo, varias voces reclamaron que la Federación Riojana de Básquet y las autoridades provinciales intervengan para esclarecer responsabilidades y evitar que hechos de esta gravedad se repitan.

Mientras tanto, el plantel de Chamical continúa evaluando los pasos a seguir y no descartan elevar la denuncia a organismos deportivos y de derechos humanos. La comunidad basquetbolística de Catamarca también expresó solidaridad con Sow, quien dejó una buena imagen durante su paso por Hindú y que hoy se ve envuelto en un episodio que, según sus compañeros, jamás debería haber ocurrido dentro ni fuera de una cancha.