Los Pumas se preparan para afrontar uno de los desafíos más importantes de su temporada y, posiblemente, de los últimos años. El seleccionado argentino de rugby cerrará este domingo su gira por el Reino Unido enfrentando a Inglaterra en el mítico estadio de Twickenham, un escenario que combina historia, mística y presión, y que suele exigir el máximo nivel a cada equipo que lo visita. Con dos triunfos consecutivos en su haber, el conjunto dirigido por Felipe Contepomi llega con el envión necesario para soñar con un cierre perfecto.
La gira ya dejó dos actuaciones memorables. Primero, en Cardiff, Los Pumas vencieron con autoridad a Gales por 52-28, mostrando un ataque eficaz y una defensa sólida. Luego, en Edimburgo, el equipo protagonizó una remontada épica ante Escocia: tras comenzar 21-0 abajo, lograron revertir el marcador y sellar un triunfo por 33-24, una victoria que reforzó la confianza del plantel y encendió la ilusión de alcanzar un hito histórico en territorio británico.
El desafío en Londres, sin embargo, será de una complejidad aún mayor. La selección inglesa atraviesa un presente superlativo. La semana pasada venció con claridad a Nueva Zelanda por 33-19, un resultado que no solo confirmó su actualidad dominante, sino que extendió a diez su racha de victorias consecutivas. Con un plantel que viene de ser subcampeón del Seis Naciones, Inglaterra se posiciona como una de las potencias más fuertes del rugby mundial.
Pese a arrastrar varias bajas importantes —entre ellas Fraser Dingwall, Jamie George, Ollie Lawrence, Tom Roebuck, Ollie Chessum y Tomy Freeman—, el equipo que dirige Steve Borthwick mantiene una estructura sólida y un funcionamiento que no se resiente. George Ford será nuevamente el conductor del equipo, mientras que el carismático Maro Itoje, uno de los mejores forwards del mundo, volverá a portar la cinta de capitán.
Felipe Contepomi, por su parte, no ocultó la magnitud del desafío. Tras la victoria ante Escocia, el head coach argentino fue contundente: "Probablemente sean el equipo más en forma del mundo, quizás solo por debajo de Sudáfrica. Es un desafío enorme". Al mismo tiempo, destacó la oportunidad histórica que tiene este plantel frente a sí. Argentina nunca logró ganar tres partidos consecutivos en una misma gira por el Reino Unido. La última vez que cosechó dos triunfos en un tour similar fue en 2001, también ante Gales y Escocia.
Contepomi remarcó que este equipo tiene la posibilidad de inscribir su nombre en la historia grande del rugby argentino. "Cuando hemos venido en el pasado, había veces que ganamos dos partidos, pero no muy a menudo. En ocasiones ganamos uno, pero nunca tres consecutivos", señaló.
La historia en Twickenham, de todos modos, ofrece antecedentes alentadores. Los Pumas ya vencieron a Inglaterra en este estadio en dos oportunidades: primero en 2006, por 25-18, y más tarde en 2022, en un ajustado 30-29. A eso se suma la buena impresión que dejó la derrota ajustada ante Sudáfrica en octubre pasado, cuando la Argentina cayó 29-27 tras haber liderado el encuentro 13-3.
Además del desafío deportivo, el partido ante Inglaterra tiene implicancias estratégicas. La victoria ante Escocia aseguró al seleccionado argentino la sexta posición en el ranking mundial y su condición de cabeza de serie para el sorteo del Mundial 2027, que se disputará en Australia. Este duelo servirá como parámetro para medir el nivel del equipo en el arranque del nuevo ciclo mundialista y también de cara al futuro Campeonato de Naciones 2026, que reunirá a las doce mejores selecciones del planeta.
Para el encuentro en Londres, Contepomi confirmó la formación titular: Gallo; Montoya; Delgado; Petti; Rubiolo; González; Kremer; Grondona; Benítez Cruz; Albornoz; Delguy; Piccardo; Moroni; Isgró; Mallía. En el banco estarán: Ruiz, Wenger, Rapetti, Molina, Matera, Oviedo, Moyano y Carreras.
La principal novedad es el regreso de Tomás Albornoz, ya recuperado de la lesión en los isquiotibiales que sufrió durante el Rugby Championship. El apertura reemplaza a Gerónimo Prisciantelli y vuelve a ocupar un rol clave para el armado del juego ofensivo.