Los Pumas afrontan este domingo un desafío determinante en el camino hacia la Copa del Mundo de Australia 2027. La selección argentina de rugby, dirigida por Felipe Contepomi, se medirá con Escocia en el histórico estadio de Murrayfield, en Edimburgo, a partir de las 12.10 (hora argentina). El encuentro corresponde al segundo compromiso de la ventana internacional de noviembre y llega apenas una semana después de la convincente victoria frente a Gales, un resultado que impulsó la confianza del equipo y reforzó su ambición de seguir creciendo en el ranking.
El duelo tiene un atractivo deportivo evidente: se enfrentan dos equipos con gran capacidad ofensiva, dinámicos, intensos y con estilos que prometen un partido vibrante. Pero el verdadero peso del encuentro va más allá del resultado inmediato. Tanto Argentina como Escocia están inmersas en una disputa ajustada por el sexto puesto del ranking de World Rugby, una ubicación que será determinante en el sorteo de grupos para el Mundial 2027.
Hoy, Los Pumas ocupan el sexto lugar, con 84.30 puntos, pero su margen es estrecho. Australia, séptima, suma 81.69, mientras que Escocia, octava, está prácticamente al acecho con 81.21 puntos. En ese contexto, una victoria argentina en Edimburgo podría solidificar su presencia entre los seis mejores del mundo, una posición clave para evitar enfrentar rivales de mayor peso en la fase inicial de la próxima Copa del Mundo.
Un partido con impacto mundialista
Con la ampliación del Mundial de 20 a 24 equipos, el sistema de cabezas de serie cobra aún mayor relevancia. Los seis primeros del ranking ocuparán los lugares privilegiados en el sorteo que se realizará en diciembre. Para Contepomi y su staff, y también para un plantel en plena etapa de consolidación, asegurar ese sexto puesto representa tanto un logro simbólico como una ventaja estratégica de cara al futuro.
Del lado escocés, el entrenador Gregor Townsend encara el partido con la urgencia de sumar puntos para reingresar en el lote de las potencias del norte. Escocia apuesta a un juego dinámico, conducido por el talentoso Finn Russell, una de las figuras del rugby europeo. Junto a él, la presencia de jugadores como Darcy Graham, Tuipulotu y Steyn conforma una línea de backs de gran explosividad, capaz de generar peligro desde cualquier sector de la cancha.
Formaciones confirmadas
Escocia saldrá al campo con:
Blair Kinghorn; Darcy Graham, Rory Hutchinson, Sione Tuipulotu (capitán) y Kyle Steyn; Finn Russell y Ben White; Rory Darge, Jack Dempsey y Gregor Brown; Grant Gilchrist y Scott Cummings; D'Arcy Rae, Ewan Ashman y Pierre Schoeman.
Suplentes: Duhan van der Merwe, Tom Jordan, Jamie Dobie, Matt Fagerson, Josh Bayliss, Elliot Millar Mills, Nathan McBeth y George Turner.
Argentina formará con:
Juan Cruz Mallía; Rodrigo Isgró, Matías Moroni, Santiago Chocobares y Mateo Carreras; Gerónimo Prisciantelli y Simón Benítez Cruz; Juan Martín González, Joaquín Oviedo y Santiago Grondona; Pedro Rubiolo y Guido Petti Pagadizábal; Pedro Delgado, Julián Montoya (capitán) y Mayco Vivas.
Suplentes: Justo Piccardo, Santiago Carreras, Agustín Moyano, Pablo Matera, Efraín Elías, Francisco Coria Marchetti, Thomas Gallo e Ignacio Ruiz.
Horario, árbitro, TV y el historial
El encuentro será dirigido por el irlandés Andrew Brace y televisado por ESPN y Disney+. El historial marca un leve predominio escocés: en 25 partidos, los europeos ganaron 13, mientras que Los Pumas se impusieron en 12. No hubo empates. La última victoria argentina en Edimburgo fue en 2009, por un ajustado 9-6, una marca que el equipo buscará quebrar después de 15 años.
El escenario está preparado para un duelo que puede marcar un antes y un después en el camino hacia Australia 2027. Para Los Pumas, no es solo un partido: es una oportunidad para consolidar una posición estratégica en el rugby mundial.