Juan Román Riquelme continúa trabajando en silencio en uno de los proyectos más ambiciosos de su gestión como presidente de Boca Juniors: la ampliación de la Bombonera. Desde que asumió su cargo, esta iniciativa ha sido una de sus prioridades y, aunque aún no se ha hecho un anuncio oficial, es un hecho que el estadio Alberto J. Armando será remodelado en los próximos años para aumentar su capacidad.
Fuentes cercanas a la dirigencia aseguran que los cambios sorprenderán a los hinchas y que, a diferencia de lo ocurrido con el Monumental de River Plate, el estadio no llevará el nombre de un patrocinador. Si bien todavía no se ha confirmado la cifra exacta de la capacidad final, se estima que superará los 80.000 espectadores, consolidándolo como uno de los recintos más grandes de Argentina y Sudamérica.
Consultado sobre la ampliación, Riquelme descartó cualquier tipo de negociación para adquirir las propiedades vecinas y afirmó que la Bombonera será mejorada respetando a los habitantes de la zona. Además, destacó que Boca tiene garantizado el uso del estadio por varias décadas más.
El plan de remodelación contempla la demolición del sector de palcos para construir nuevas gradas en el espacio aéreo de la calle Dr. del Valle Iberlucea, lo que permitirá cerrar la tradicional herradura sin necesidad de comprar terrenos linderos. También se planea desplazar el campo de juego algunos metros hacia la calle Irala para optimizar el espacio disponible. Entre otros cambios, la Platea Baja tendrá modificaciones para mejorar la visual y la Platea Media recuperará su palco institucional.
Otro de los aspectos en evaluación es la instalación de un techo parcial para proteger a las tribunas y el campo de juego. Además, el proyecto incluye la incorporación de locales comerciales para dinamizar el barrio de La Boca, propuesta que deberá ser aprobada por el Gobierno porteño. Con la eliminación de butacas en la Platea K y las nuevas estructuras, la capacidad del estadio aumentará considerablemente.
El proceso de remodelación implicará que el primer equipo juegue de local en otro estadio durante las obras. No obstante, desde el club desmintieron haber alcanzado un acuerdo con la Provincia de Buenos Aires para utilizar el Estadio Único de La Plata.
Antes de llevar adelante esta reforma histórica, Boca inaugurará en 2025 un microestadio y un polideportivo para disciplinas como futsal, básquet, vóley y handball. También se construirá un gimnasio de última generación para los socios y se mejorarán las instalaciones del fútbol femenino en Casa Amarilla.
Entre los proyectos a futuro, Riquelme también impulsa la construcción de un hotel de concentración en el predio de Ezeiza, con el objetivo de equiparar las comodidades de Boca con las de los clubes más importantes del mundo. En primera instancia, se construirá un alojamiento para los jugadores de la Reserva, como parte del plan integral de modernización de las instalaciones.
"Tenemos que soñar en grande y lo vamos a lograr", expresó Riquelme, convencido de que estas obras marcarán un antes y un después en la historia del club de la Ribera.