Entre las apuestas de largo plazo de la economía argentina, el sector energético concentra hoy la mayor atención. El Gobierno sigue de cerca los números récord que arroja Vaca Muerta, los proyectos en marcha y las proyecciones que anticipan un fuerte ingreso de dólares en los próximos años, un escenario que también impacta en provincias como Catamarca, atentas al derrame de inversiones y actividad.
Las estimaciones del sector indican que las exportaciones de petróleo y gas cerrarán el año con un crecimiento cercano al 20% respecto de 2024 y que, para 2026, podrían alcanzar los US$17.000 millones, aun con mayores volúmenes exportados y precios internacionales más bajos que los actuales.
Más aún, con las inversiones en ejecución y las proyectadas, junto con la apertura de nuevos mercados, hacia el inicio de la próxima década la Argentina podría exportar energía por hasta US$50.000 millones anuales. "Sería como sumar un campo y medio más", señalan en la industria, en referencia a la magnitud de divisas que hoy genera la agroindustria, principal complejo exportador del país.
En ese contexto, el cierre del año encuentra a las principales empresas del sector consolidando alianzas y acuerdos para incrementar la producción de petróleo y gas en Vaca Muerta. En paralelo, otros operadores avanzan sobre áreas maduras, fuera de la megaformación, consideradas clave para garantizar el abastecimiento interno.
Los proyectos que empujan al sector energético
Durante 2025, el sector de Combustibles y Energía acumula exportaciones por más de US$10.000 millones. De acuerdo con datos del Indec, las ventas externas de petróleo y gas crecieron un 52% interanual en noviembre y permitieron alcanzar un superávit comercial de US$6.911 millones.
Con este desempeño, la balanza energética está próxima a cerrar 2025 con su quinto año consecutivo de superávit, tras más de dos décadas de déficits estructurales.
La clave para 2026 estará en las inversiones millonarias previstas por las principales compañías, orientadas a duplicar la producción en Vaca Muerta. Se trata, principalmente, de obras de infraestructura para transportar el petróleo y el gas, que mes a mes alcanzan nuevos máximos de extracción.
Entre los proyectos más relevantes figuran la ampliación del sistema Oleoductos del Valle (Oldelval) y la construcción del VMOS, una iniciativa incluida en el Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI), que estará operativa hacia fines de 2026 y permitirá ampliar la capacidad exportadora de crudo.
Mientras avanzan esas obras, las petroleras comenzaron a cerrar acuerdos de exportación. YPF, Vista Energy, Shell y Equinor firmaron este mes un contrato con la Empresa Nacional del Petróleo de Chile (ENAP) para vender al menos 70.000 barriles diarios a través del Oleoducto Trasandino.
Por su parte, Pluspetrol ofertó vender gas a Chile por los próximos 52 años, una operación inusual luego de décadas de restricciones a las exportaciones por falta de recursos. En tanto, Pan American Energy (PAE) firmó un contrato para exportar gas natural de Vaca Muerta a Uruguay mediante el gasoducto Cruz del Sur, donde será utilizado para generación eléctrica en centrales térmicas.
Exportar gas por barco, la gran apuesta
El Gobierno apuesta a convertir a la Argentina en un actor energético relevante a nivel global y pone el foco en el gas natural licuado (GNL) como eje central de esa estrategia. La expectativa oficial es que la exportación de gas por barco genere entre US$15.000 y US$20.000 millones anuales a partir de 2031.
De la mano de Vaca Muerta, los proyectos para vender gas y petróleo al mundo se multiplican. Mientras se firman convenios, tanto el sector público como el privado aceleran contactos para identificar compradores del GNL argentino, con la mira puesta en 2027, cuando se prevé que comience a operar el primer buque licuificador frente a las costas de Río Negro.
El proyecto "Argentina LNG" se estructura en tres etapas. La primera corresponde a la asociación entre YPF y Shell para producir gas en Vaca Muerta y procesarlo en buques destinados a la exportación. La segunda involucra a Southern Energy, integrada por PAE, YPF, Pampa Energía, Harbour y Golar, y prevé exportaciones desde fines de 2027. Esta etapa cuenta con RIGI aprobado por una inversión de US$2.700 millones y ya firmó un acuerdo con Alemania para proveer dos millones de toneladas.
La tercera etapa es la asociación entre YPF y ENI, firmada en Roma, que busca potenciar la exportación de GNL por más de US$100.000 millones en un plazo de 20 años. Antes de fin de año se espera la incorporación formal del grupo Adnoc. Una vez concretado ese paso, el banco JP Morgan saldrá a buscar financiamiento para el megaproyecto, que demandará alrededor de US$20.000 millones y la participación de unas 200 entidades financieras.
A este esquema se suma el proyecto "LNG del Plata", impulsado por Camuzzi en el puerto de La Plata, que permitirá procesar gas de Vaca Muerta para exportación y, al mismo tiempo, abastecer el mercado interno durante el invierno. La inversión prevista asciende a US$3.900 millones e incluye la construcción de un gasoducto subacuático.