Las Fuerzas Armadas de la India llevaron a cabo este martes una serie de ataques de precisión sobre campamentos terroristas ubicados en la región de Jammu y Cachemira controlada por Pakistán. La acción militar, denominada "Operación Sindoor", fue confirmada oficialmente a través de un comunicado en el que se detalló que fueron alcanzados nueve objetivos identificados como bases desde donde se planificaban y dirigían ataques contra territorio indio.
El operativo fue ejecutado pocos días después de que Nueva Delhi responsabilizara directamente a Islamabad por el atentado en Pahalgam, en la Cachemira india, donde murieron 26 personas. Según el gobierno indio, esta acción constituye una respuesta directa a aquel hecho, en el marco de una estrategia que, subrayan, busca evitar una escalada del conflicto.
"El Ejército de la India ha llevado a cabo ataques concentrados, mesurados y sin escaladas, apuntando exclusivamente a infraestructuras terroristas. No se atacaron instalaciones militares de Pakistán", expresó el comunicado oficial difundido por las Fuerzas Armadas indias.
El mensaje resalta además que "India ha demostrado una considerable moderación en la selección de objetivos y en el método de ejecución", insistiendo en que la respuesta fue proporcional y cuidadosamente calibrada para evitar un conflicto abierto entre ambas potencias nucleares.
En redes sociales, el Ejército indio reforzó el mensaje con publicaciones en X (antes Twitter), donde se leyeron expresiones como "Se hizo justicia" y "¡Jai Hind!" (¡Victoria para la India!). Los posteos estuvieron acompañados de la etiqueta #PahalgamTerrorAttack, en referencia al ataque perpetrado el mes pasado.
La situación en la región de Cachemira, en disputa desde hace décadas entre India y Pakistán, vuelve a tensarse tras este episodio, en un contexto regional siempre delicado y con antecedentes de escaladas militares. Hasta el momento, Islamabad no ha emitido una respuesta oficial sobre la operación.