El gobierno de Javier Milei anunció la desclasificación de documentos secretos relacionados con los nazis que se refugiaron en Argentina tras la Segunda Guerra Mundial. La información fue confirmada por el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, quien detalló que la medida responde a un pedido del senador republicano estadounidense Steve Daines.
Este anuncio se suma a la reciente decisión de liberar archivos sobre el accionar de las Fuerzas Armadas durante la última dictadura militar. Según Francos, Milei ya ha dado la orden para que toda información relevante en los organismos del Estado sea de acceso público, especialmente aquella contenida en el Ministerio de Defensa y en registros financieros.
Presión internacional y antecedentes históricos
El senador Steve Daines, quien visitó recientemente la Casa Rosada, ha trabajado activamente en la investigación sobre la llegada de criminales de guerra nazis a América Latina. Durante su reunión con Milei, Daines solicitó la liberación de documentos que podrían arrojar luz sobre el rol de Argentina en la posguerra y la protección brindada a figuras clave del nazismo.
Esta medida no solo busca esclarecer el pasado, sino también cumplir con el decreto 4/2010, que ordenaba la desclasificación de documentos y que nunca fue completamente implementado. Según Francos, "no hay ningún motivo para resguardar información" que pueda contribuir a conocer la verdad histórica.
La postura del Gobierno sobre los crímenes de lesa humanidad
Además de la desclasificación de archivos, el Gobierno anunció que reconocerá ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) el atentado del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP) contra la familia del capitán Humberto Viola como un crimen de lesa humanidad. Este ataque, ocurrido en 1974 en Tucumán, resultó en la muerte del militar y su hija de tres años.
La nueva postura oficial permitirá que la Justicia reabra la investigación, ya que hasta ahora no se consideraba un delito imprescriptible. Para reforzar esta iniciativa, el Gobierno enviará al Congreso un proyecto de ley para declarar la imprescriptibilidad penal y civil de estos crímenes.
Consecuencias políticas y reacciones
El anuncio de estas desclasificaciones y cambios en la política de derechos humanos genera un fuerte impacto en el escenario político argentino. Desde la oposición y organismos de derechos humanos, se señala que estas decisiones podrían ser utilizadas con fines políticos en el marco de la "batalla cultural" promovida por el oficialismo.
Por otro lado, sectores de la derecha y grupos historiográficos han respaldado la medida, considerándola un paso hacia la "memoria completa" y la justicia para todas las víctimas de violencia política en la historia argentina.
Un nuevo capítulo en la memoria histórica
Con estas medidas, el Gobierno de Javier Milei abre una nueva etapa en la política de desclasificación de archivos, con implicaciones tanto en la búsqueda de verdad histórica como en el debate político contemporáneo. La apertura de estos documentos podría traer revelaciones significativas y redefinir la interpretación de eventos clave en la historia argentina.
A medida que se publiquen los archivos, el impacto de esta decisión podrá ser evaluado con mayor profundidad, tanto a nivel nacional como internacional.