Marcha atrás con los cambios en Vialidad Nacional, el INTA y otros organismos
La gestión de Javier Milei dejó sin efecto los decretos que buscaban reestructurar organismos públicos, limitar el derecho a huelga y modificar entidades estratégicas. La decisión se formalizó a través de dos nuevos DNU publicados en el Boletín Oficial.

El Gobierno de Javier Milei dio marcha atrás con los cambios en Vialidad Nacional, el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), el Banco Nacional de Datos Genéticos y otros organismos, luego de que el Congreso rechazara cinco decretos delegados que impulsaban esas modificaciones.

La reversión quedó oficializada este miércoles a través de los DNU 627 y 628, publicados en el Boletín Oficial, que restituyen "la plena vigencia de las disposiciones normativas que fueron derogadas, sustituidas o modificadas" por los decretos cuestionados.

La medida también alcanza a disposiciones derogadas por otros decretos dictados entre el 1° y el 14 de agosto. Según la justificación oficial, el paso atrás busca "no comprometer la continuidad operativa de la Administración Pública Nacional y salvaguardar los principios de buena administración, juridicidad, buena fe y simplificación administrativa".

Los decretos delegados rechazados habían generado fuerte polémica, ya que incluían:

La disolución de la Dirección Nacional de Vialidad, la Agencia Nacional de Seguridad Vial y la Comisión Nacional de Tránsito y Seguridad Vial.

Cambios en el régimen laboral de la Marina Mercante y la habilitación a buques y tripulaciones extranjeras para operar en cabotaje nacional, con restricciones al derecho de huelga.

La transformación del Banco Nacional de Datos Genéticos, que pasaba de organismo descentralizado a desconcentrado.

La eliminación de la Agencia Regulatoria de la Industria del Cáñamo.

La reorganización del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y el Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV).

La fusión del Instituto Nacional Yrigoyeano con el Instituto de Investigaciones Históricas Juan Manuel de Rosas.

El retroceso oficial se da tras el rechazo expreso de ambas cámaras del Congreso a fines de agosto, lo que obligó a la Casa Rosada a revertir los cambios que pretendían avanzar sobre organismos clave para la economía, la producción y la cultura.