Preparar buñuelos caseros es, para muchas familias catamarqueñas, sinónimo de hogar, mates compartidos y tardes en familia. Aunque esta receta tiene origen en España, en la provincia se ha vuelto parte de las costumbres cotidianas y de celebraciones populares, especialmente durante los meses más frescos.
Los buñuelos de la abuela se caracterizan por su textura esponjosa y su aroma a vainilla, que remite a meriendas familiares y reuniones en la cocina. Además, permiten agregar sabores como puré de manzana o banana pisada, logrando un toque distintivo sin perder su esencia tradicional.
Si bien existen múltiples versiones, la propuesta del sitio Pequerecetas.com se destaca por su resultado húmedo y sabroso, ideal para quienes buscan un clásico casero sin complicaciones.
Ingredientes:
1 taza de harina común 0000
½ cucharadita de sal
½ cucharadita de polvo de hornear
¼ taza de azúcar (opcional)
1 huevo grande
½ taza de leche
¼ taza de aceite
1 cucharadita de esencia de vainilla
1 limón (ralladura, opcional)
Azúcar para espolvorear
Preparación paso a paso:
Mezclar los secos: En un recipiente, colocar azúcar, harina, sal y polvo de hornear.
Batir los líquidos: En otro bol, mezclar el huevo con la leche. Incorporar esencia de vainilla y ralladura de limón.
Unir todo: Combinar ambas preparaciones hasta lograr una masa homogénea, similar a la de panqueques.
Freír: Calentar aceite a fuego medio en una sartén. Con una cuchara, verter porciones pequeñas y cocinar de 1 a 2 minutos por lado, hasta que estén doradas de forma pareja.
Escurrir y decorar: Retirar con espumadera, colocar sobre papel de cocina y espolvorear con azúcar. Se puede sumar miel, chocolate o canela al gusto.
En Catamarca, es habitual encontrarlos en meriendas familiares, puestos callejeros o como acompañamiento infaltable en festividades populares. Son, más que una receta, un símbolo de momentos compartidos.