Lorenza volvió a sus pagos: emoción en el reencuentro con sus montañas

Ella fue noticia el pasado mes de Julio tras haberse descompensado estando sola allá lejos y allá en lo alto de la cordillera a 4.000 metros en Fiambalá. Luego vino su traslado en helicoptero, una cirugía por unos hematomas subdurales y después el regreso al departamento del oeste provincial, en compañía de la madre de Walter Bustamante.

Allí transcurrieron apaciblemente los días pero ella extrañaba sus cerros, sus animales y el llamado de la Pachamama. No obstante esta tranquilidad y la consecuente recuperación de Lorenza Mamaní, la nostalgia estaba latente. 

Así lo cuenta su tutor en sus redes sociales quien comentó "Lorenza esta al cuidado de mi madre y no le faltara nada,pero ayer fuimos a matar un poco las nostalgias. Nos fuimos a Río Grande".

Y el registro fotográfico que acompaña la publicación nos muestra a una mujer feliz y rodeada otra vez por sus montañas.

"Ella me explicaba todo, me decía que Río Grande se llamaba Cienega grande de los Sandon, en los tiempos cuando ella era chica. Me nombraba las Piedras Pintadas, El Corral viejo, la Mesada grande, Las Pircas, Toro Yaco, Los Machos, Campos de los Yampas. Me contaba de los gringos que vivieron en Agua Caliente en la década del 40 y los viajes de varios días en burros a buscar sal en Pairique, sobre cómo dormían en el campo. Fue una hermosa charla recordando décadas pasadas y tal vez fue unos de los últimos viajes de Lorenza a las montañas", contó Walter.