WhatsApp se prepara para afrontar uno de los mayores desafíos técnicos y logísticos de su historia: la llegada del Año Nuevo 2026. Según las proyecciones oficiales de la compañía, la plataforma de mensajería instantánea prevé un volumen de tráfico sin precedentes durante las celebraciones, con miles de millones de personas enviando mensajes, realizando llamadas y compartiendo imágenes y videos de los festejos en un lapso de apenas 24 horas.
La magnitud del evento es difícil de dimensionar. La empresa estima que más de 3.000 millones de usuarios en todo el mundo utilizarán WhatsApp de manera activa para saludar a familiares y amigos, intercambiar deseos y compartir momentos clave de la celebración. En términos prácticos, esto implica que cerca de la mitad de la población del planeta estará conectada de forma simultánea a través de la misma plataforma, generando un flujo de datos que supera ampliamente cualquier escenario cotidiano.
En un día habitual, WhatsApp asiste el envío de más de 100.000 millones de mensajes cifrados de extremo a extremo y facilita más de 2.000 millones de llamadas en todo el mundo. Sin embargo, la víspera de Año Nuevo se convirtió, año tras año, en el momento de mayor exigencia para su infraestructura tecnológica. De acuerdo con los datos técnicos y los patrones de uso analizados por la empresa, el 31 de diciembre y el 1° de enero representan el pico máximo de conectividad digital a nivel global.
Uno de los datos más impactantes difundidos por la compañía es la cifra de los 100.000 millones de mensajes cifrados que podrían enviarse durante la celebración. Para ilustrar la dimensión de este número, equivale a que cada habitante de la ciudad de Buenos Aires enviara más de ocho mil mensajes en una sola noche. Todo ese intercambio se realiza bajo estándares de privacidad y seguridad que garantizan que los contenidos permanezcan protegidos.
Además del intercambio de mensajes, WhatsApp prevé facilitar más de 2.000 millones de llamadas de voz y video a nivel global durante las fiestas. A esto se suma un volumen récord de actualizaciones de Estados, con decenas de miles de millones de publicaciones cifradas en las que los usuarios compartirán cuentas regresivas, brindis, cenas familiares y los primeros minutos de 2026.
Desde la compañía remarcan que cada segundo cuenta para asegurar que los mensajes lleguen sin demoras, en un contexto donde millones de personas presionan "enviar" al mismo tiempo. El objetivo es que cada saludo de "Feliz Año" se entregue de forma instantánea, sin interrupciones y con la calidad habitual del servicio.
En este contexto, WhatsApp también anunció la incorporación de nuevos elementos festivos que estarán disponibles durante las celebraciones de fin de año. Estas herramientas buscan enriquecer la experiencia de los usuarios y sumar recursos visuales y dinámicos para acompañar los festejos.
Entre las novedades se destaca un paquete especial de stickers de 2026, diseñado para expresar alegría y buenos deseos por el año que comienza. A su vez, durante las videollamadas, los usuarios podrán activar efectos visuales como fuegos artificiales, confeti y animaciones de estrellas, que se superponen en la pantalla y acompañan el momento de celebración.
Otra de las funciones destacadas son las reacciones especiales con papel picado animado, que se activan al utilizar el emoji correspondiente para reaccionar a mensajes. Además, los Estados de WhatsApp contarán con stickers animados y diseños especiales de Año Nuevo, pensados para compartir los festejos de una manera más creativa y personalizada.
Con estas proyecciones y herramientas, WhatsApp no solo busca acompañar uno de los momentos más importantes del calendario global, sino también batir sus propios récords históricos de uso, consolidándose como la principal plataforma de comunicación digital en eventos masivos a escala planetaria.