El empate 0 a 0 entre River Plate y Vélez Sarsfield en el estadio José Amalfitani dejó al conjunto dirigido por Marcelo Gallardo en una situación incómoda en su carrera por clasificarse a la Copa Libertadores 2026. Aunque ambos equipos ya aseguraron su presencia en los octavos de final del Torneo Clausura, el resultado modificó el panorama internacional del Millonario, que ahora deberá aguardar una combinación de resultados ajenos para obtener un cupo en el máximo certamen de clubes de Sudamérica.
El partido, correspondiente a la última fecha del Clausura, comenzó con una postura agresiva por parte de River. El equipo de Núñez generó tres ocasiones claras durante los primeros minutos, imponiendo velocidad y presión alta. Sin embargo, la respuesta de Vélez no tardó en llegar. El conjunto dirigido por Guillermo Barros Schelotto ajustó líneas, equilibró el juego y, con el correr de los minutos, tomó cierto dominio territorial.
En el tramo final de la primera etapa, el Fortín tuvo las oportunidades más claras del encuentro. La falta de eficacia frente al arco y las intervenciones de Franco Armani evitaron que el local rompiera la igualdad. El partido se mantuvo abierto y tenso, con imprecisiones y momentos de fricción que marcaron un desarrollo sin un dominador absoluto.
El complemento mostró una versión aún más dinámica del duelo. Ambos equipos intercambiaron ataques, generaron aproximaciones peligrosas y encontraron en sus arqueros a figuras clave para sostener el cero. A los 23 minutos, Armani protagonizó una tapada determinante ante un remate de Tomás Cavanagh, quien había quedado con el arco a su disposición tras una jugada de pelota parada. Instantes después, el joven Thiago Acosta intentó sorprender desde media distancia, pero Tomás Marchiori respondió enviando el balón al córner.
Tras el empate, River quedó ubicado en el cuarto puesto de la tabla anual, una posición que no le asegura el boleto directo a la Libertadores. Para acceder al repechaje otorgado por este ránking, el Millonario ahora depende de un resultado externo: necesita que el campeón del Torneo Clausura sea Rosario Central, Boca Juniors o Argentinos Juniors. Solo si uno de esos tres equipos se consagra, River obtendrá el cupo al certamen continental por tabla.
Sin embargo, aún existe un riesgo adicional. Racing podría desplazar a River del cuarto lugar si derrota a Newell's por una diferencia superior a cinco goles. Un escenario improbable, pero matemáticamente posible, que agrega tensión a la definición del campeonato.
Así, el Millonario quedó a la espera de lo que ocurra en los encuentros decisivos, mientras su rendimiento en la tabla anual —última vía real de clasificación— quedó condicionado por los resultados ajenos. El conjunto de Gallardo ya había visto cerrarse otras rutas hacia la Libertadores tras ser eliminado por Palmeiras en la competencia internacional y por Independiente Rivadavia en la Copa Argentina.
No obstante, todavía le queda una alternativa más: la chance de consagrarse campeón del Clausura. Si River logra avanzar en los playoffs y termina levantando el título, asegurará automáticamente su ingreso directo a la Copa Libertadores 2026, sin depender de lo que ocurra con el resto de los equipos.
Por su parte, Vélez cerró la fase regular en la cuarta posición de la Zona B con 26 puntos, lo que le permitirá disputar los octavos de final como local. River, sexto con 22 unidades, deberá afrontar el primer cruce de la serie al inicio de los playoffs fuera de casa. En ese contexto, Gallardo ya reorienta su enfoque: ganar el Clausura se convirtió en la vía más clara —y tal vez la única— para garantizar la presencia internacional que exige la historia del club de Núñez.