La Selección argentina volvió a decir presente en un escenario internacional de enorme relevancia futbolística. Este viernes, su entrenador, Lionel Scaloni, entregó la Copa del Mundo durante la ceremonia oficial del sorteo del Mundial 2026, que se disputará el próximo año en Estados Unidos, México y Canadá. El evento tuvo lugar en el imponente Centro John F. Kennedy, en la ciudad de Washington, y contó con la cobertura de la Agencia Noticias Argentinas.
Como campeón vigente tras el histórico título conquistado en Qatar 2022, Scaloni fue la figura elegida para presentar el trofeo que volverá a estar en juego en la edición 2026. Su presencia en el escenario no solo significó un homenaje simbólico al logro deportivo más resonante de la última década para el fútbol argentino, sino también un recordatorio de la vigencia competitiva del seleccionado nacional.
La FIFA llevó adelante el sorteo que definirá la conformación de la primera Copa del Mundo organizada de manera conjunta por tres países y que, además, contará con el nuevo formato ampliado a 48 equipos. La ceremonia reunió a dirigentes, exjugadores, entrenadores, autoridades y figuras invitadas, consolidando el evento como uno de los momentos más esperados rumbo a la cita que se iniciará en junio del año próximo.
En ese marco, Scaloni brindó declaraciones sobre el significado de la Copa obtenida en Qatar y el valor emocional de aquella final inolvidable frente a Francia. "La recuerdo como una final inolvidable, donde pasaron un montón de cosas y nuestro equipo, a pesar de las dificultades, siguió creyendo y nunca pensamos que ese partido podía terminar mal", expresó el entrenador, rememorando uno de los encuentros más épicos en la historia de los mundiales.
El técnico destacó además el espíritu competitivo que pretende mantener de cara a la próxima edición: "Es lo que intentaremos en la próxima Copa del Mundo: seguir compitiendo y no dar nunca nada por perdido. Eso es lo que espera nuestra gente". Sus palabras reflejaron el compromiso del cuerpo técnico y del plantel con sostener el nivel que llevó a la Selección a convertirse en tricampeona mundial.
La participación de Scaloni en la ceremonia también marcó el inicio simbólico del camino argentino hacia el Mundial 2026. A pesar de que el sorteo no determina la suerte deportiva de la Selección —clasificada de manera directa como defensora del título—, sí abre una nueva etapa en la que comenzarán a definirse detalles organizativos, logísticos y deportivos de cara a la competencia.
El entrenador, cuya continuidad al mando del equipo ha sido ratificada tras varias semanas de incertidumbre a lo largo del ciclo, se mostró relajado, cercano al público e involucrado emocionalmente con la representación que cargaba: ser la voz y la imagen del campeón. Su presencia en Washington reforzó la importancia del proyecto que lidera y que, desde 2018, ha devuelto a la Selección a lo más alto del fútbol mundial.
La ceremonia concluyó con presentaciones artísticas, mensajes institucionales y el esperado armado de los grupos, dando inicio a una cuenta regresiva que ya empieza a sentirse en todo el planeta fútbol. Para la Argentina, el viaje hacia una nueva ilusión ya está en marcha.