El gremio petrolero FaSiPeGyBio (Federación Argentina Sindical del Petróleo, Gas y Biocombustibles) lanzó una dura advertencia: si no se alcanza un nuevo acuerdo paritario con las cámaras empresariales antes del martes 20 de mayo, iniciarán un paro nacional. La medida podría generar un impacto directo en el abastecimiento de nafta y gasoil en todo el país.
"Exhortamos al sector empresario a recomponer de manera inmediata el deterioro salarial de los trabajadores petroleros y los responsabilizamos de cualquier ruptura de la paz social que se produzca, así como de las consecuencias del desabastecimiento de combustibles en toda la República Argentina", sostuvo el gremio en un comunicado oficial.
Actualmente, la negociación salarial se encuentra trabada. El sindicato había pactado con las cámaras empresariales una suba del 11% para compensar los salarios rezagados frente a la inflación correspondiente al período abril 2024-abril 2025. Sin embargo, las empresas afirmaron que no pueden homologar ese aumento porque supera el tope del 1% mensual impuesto por el Gobierno nacional.
"De no llegar a un acuerdo concreto antes del martes 20 de mayo, que contemple tanto el cierre del período 2024/2025 como el inicio del nuevo ciclo 2025/2026, y el cumplimiento efectivo de los acuerdos ya suscriptos, se iniciarán medidas de fuerza en todo el territorio nacional", advirtió el sindicato que conducen Gabriel Barroso y Mario Lavia.
Riesgo de desabastecimiento
La amenaza de paro genera preocupación en distintos sectores. De concretarse la huelga, el suministro de combustible en estaciones de servicio, aeropuertos y otros puntos críticos podría sufrir interrupciones a partir del 20 de mayo. La tensión se incrementa ante el escenario de alta demanda de cara al invierno y al movimiento turístico del próximo fin de semana largo.
El Gobierno sostiene el tope salarial para frenar la inflación
Desde la Casa Rosada, el Gobierno mantiene firme su decisión de no convalidar paritarias que superen el 1% mensual. La postura oficial se inscribe en el objetivo de preservar el equilibrio fiscal y consolidar el descenso inflacionario.
El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, reconoció que la administración de Javier Milei impuso un techo a las negociaciones salariales. "Si uno permite que el salario se vaya más allá de lo que se ha establecido como pauta o tope, obviamente los precios aumentan. Y los que reclaman hoy por aumentos salariales vuelven a hacerlo más adelante porque otra vez suben los precios", explicó.
El conflicto entre el gremio petrolero y las cámaras empresariales se suma a una serie de tensiones que crecen en la antesala de la temporada alta de paritarias. Con los sindicatos presionando por recuperar el poder adquisitivo perdido, el riesgo de nuevas medidas de fuerza se extiende a otros sectores clave de la economía.