Con la llegada de los días más calurosos, el aire acondicionado vuelve a convertirse en uno de los electrodomésticos más utilizados. Sin embargo, su funcionamiento continuo puede impactar de forma notable en la factura de electricidad. Frente a ese escenario, expertos coinciden en que existe una temperatura ideal para evitar gastos innecesarios.
Aunque la mayoría recurre a los 22° o 24°, ninguna de esas configuraciones es la recomendada. Los especialistas afirman que lo más eficiente es ajustar el equipo a 26°, una temperatura que permite mantener el ambiente agradable sin forzar el aparato.
Por qué conviene usar el aire acondicionado a 26°
- Reduce el esfuerzo del compresor, la parte que más energía consume.
- Evita cambios bruscos de temperatura que generan encendidos y apagados constantes.
- Mantiene un confort térmico adecuado: lo importante es la diferencia respecto del exterior, no enfriar en exceso.
Puede ahorrar entre un 20% y un 30% de energía, según el uso y la aislación del hogar.
Consejos clave para ahorrar aún más
- Modo "dry" en días húmedos: baja la sensación térmica sin enfriar demasiado.
- Cerrar cortinas y persianas: impide que el sol caliente el ambiente y acelera el proceso de enfriado.
- Puertas y ventanas bien cerradas: cualquier fuga obliga al equipo a trabajar más.
- Limpieza de filtros cada 15 a 30 días: un filtro sucio aumenta el consumo hasta un 10%.
- Usar ventiladores: permiten subir uno o dos grados la temperatura del aire acondicionado sin perder confort.
En una provincia como Catamarca, donde el verano suele ser especialmente intenso, estos ajustes pueden marcar una diferencia significativa en el consumo energético y en el rendimiento de los equipos.