La cosecha apunta a un récord histórico: proyectan 142,6 millones de toneladas
La Bolsa de Cereales de Buenos Aires estimó un aumento del 8,9% en la producción total para la campaña 2025/26, con récords en maíz y girasol. Aun así, advierte que el agro argentino sigue estancado y reclama políticas estables y menor presión impositiva para alcanzar su potencial.

En el marco del lanzamiento de la Campaña Gruesa 2025/26, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires presentó este martes sus primeras estimaciones de producción, proyectando un incremento del 8,9% en la cosecha total respecto al ciclo anterior, con récords en maíz y girasol. Sin embargo, la entidad advirtió que para alcanzar el potencial productivo de 155 millones de toneladas se requieren políticas estables y la eliminación de impuestos distorsivos.

El presidente de la Bolsa, Ricardo Marra, subrayó la necesidad de estabilidad y previsibilidad: "Los impuestos distorsivos sobre la producción deben ser eliminados. Si bien comprendemos la situación macroeconómica y acompañamos la necesidad de equilibrio fiscal, es fundamental avanzar hacia políticas permanentes que otorguen un horizonte de largo plazo", señaló.

Marra destacó también algunas medidas del Gobierno nacional, como la unificación cambiaria, la eliminación de restricciones cuantitativas a las exportaciones, la desburocratización del comercio y la apertura de mercados. No obstante, advirtió que "la clave para consolidar un crecimiento sostenido es establecer reglas de juego claras que permitan al sector agropecuario desplegar todo su potencial".

Proyecciones por cultivo

El economista jefe de la Bolsa, Ramiro Costa, presentó el detalle de las estimaciones. La producción total de la campaña alcanzaría 142,6 millones de toneladas, con un aumento del 8,9%. Entre los cultivos:

Maíz: 58 millones de toneladas (+18,4%)

Soja: 48,5 millones de toneladas (-3,6%)

Girasol: 5,8 millones de toneladas (+16%)

Sorgo: 3 millones de toneladas (-3,2%)

A estos cultivos gruesos se suman los de invierno, con trigo proyectado en 22 millones de toneladas y cebada en 5,3 millones de toneladas.

Costa destacó además la intención de los productores de aplicar un alto nivel tecnológico en los cultivos, con inversiones que superarían los US$ 15.000 millones, especialmente en maíz destinado a grano comercial.

Limitaciones y desafíos

Pese a los números positivos, Costa relativizó el optimismo: "Un récord que no sé si es para festejar tanto. La producción argentina está estancada desde hace años; no crece de manera sistemática. Estos 143 millones de toneladas no son muy distintos de los 140 millones de 2018/2019".

El economista señaló que factores como los derechos de exportación, la brecha cambiaria, la presión impositiva, la falta de infraestructura, los altos costos logísticos y la inestabilidad macroeconómica frenan el crecimiento. "En comparación con países competidores como Brasil, estamos absolutamente estancados. Argentina debería estar produciendo 150 o 155 millones de toneladas como nuevo normal, y no conformarse con los 130 de los últimos años", afirmó.

En términos económicos, Costa proyectó exportaciones por US$ 32.938 millones (+3,3%), una recaudación fiscal consolidada de US$ 12.905 millones (+6,5%) y un valor agregado de US$ 43.237 millones.

"Con más y mejor adopción de tecnología, nuestro país podría alcanzar fácilmente los 155 millones de toneladas de producción. Para eso es fundamental la adopción de políticas estables y de largo plazo que tiendan a reducir la carga impositiva", concluyó.