Horror en México: hallan 20 cuerpos colgados y decapitados en un puente
La masacre, atribuida a las disputas entre facciones del cartel de Sinaloa, dejó un saldo de 20 hombres asesinados, cinco de ellos decapitados. El estado acumula más de 1.200 muertos y 1.400 desaparecidos en lo que va del conflicto.

Una nueva masacre vinculada al narcotráfico sacudió este lunes 30 de junio al estado de Sinaloa, al noroeste de México. Las autoridades locales hallaron los cuerpos de 20 hombres asesinados, cinco de ellos decapitados, en una carretera que conecta con Culiacán, la capital estatal. Parte de las víctimas fueron colgadas de un puente y el resto estaba dentro de una camioneta.

Según confirmó la Fiscalía General de Sinaloa, cuatro de los cadáveres colgados del puente estaban suspendidos boca abajo por las piernas. Otros 16 cuerpos, uno de ellos también decapitado, fueron encontrados en el interior de un vehículo estacionado en la misma zona. En una bolsa de plástico hallada junto a la escena, se localizaron cinco cabezas humanas.

El informe oficial detalló que todas las víctimas presentaban heridas de bala, lo que refuerza la hipótesis de una ejecución múltiple vinculada a las disputas internas del cartel de Sinaloa. Durante la madrugada, imágenes de los cuerpos comenzaron a circular en redes sociales, aunque la fiscalía no confirmó su autenticidad.

El personal forense trasladó los cuerpos al servicio médico legal para su identificación, mientras avanza la investigación.

El estado de Sinaloa, bastión histórico del narcotráfico en México, atraviesa una escalada de violencia desde mediados de 2024, cuando se intensificaron los enfrentamientos entre dos facciones del cartel: por un lado, los hijos de Joaquín "El Chapo" Guzmán, condenado a cadena perpetua en Estados Unidos; por el otro, el ala comandada por Ismael "Mayo" Zambada, también fundador de la organización, detenido en julio de 2024 y actualmente juzgado en una corte de Nueva York.

El episodio que marcó un punto de quiebre fue precisamente su captura, que derivó en represalias sangrientas. Desde entonces, el conflicto dejó más de 1.200 muertos y cerca de 1.400 personas desaparecidas, según cifras oficiales del gobierno mexicano.