La actividad sísmica continúa en la península de Kamchatka, en el extremo oriental de Rusia, donde este miércoles se registró un nuevo sismo de magnitud 6,2, según informó la Academia de Ciencias de Rusia. El fenómeno ocurrió a las 21:56 hora local, con epicentro a 69 kilómetros de profundidad y a unos 200 kilómetros al este de Petropávlovsk-Kamchatski, la capital regional.
El área ya había sido escenario de un fuerte terremoto de magnitud 8,8, y desde entonces los habitantes reportan múltiples réplicas. Las autoridades científicas confirmaron que los movimientos telúricos persisten y continúan siendo monitoreados con atención.
En consecuencia, varios países del Pacífico han registrado alteraciones en el nivel del mar. Las costas de Japón, Hawaii y California experimentaron subidas y retrocesos repentinos del mar, aunque sin causar hasta el momento daños significativos.
Olas llegarán a Chile durante la jornada
En Chile, el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (SENAPRED) alertó sobre la llegada de las primeras olas a la Isla de Pascua a las 9:25 hora local (12:25 de Argentina). Para el resto del litoral chileno, se espera que el tren de olas comience a llegar cerca de las 15 (14 horas de Argentina).
"Tenemos tiempo. Las horas de arribo no son inmediatas; hay una diferencia importante desde que se detecta el inicio del tren de olas hasta su llegada a nuestras costas. Por eso, el llamado a la ciudadanía es a mantener la calma y seguir la información oficial", explicó Alicia Cebrián, directora nacional del SENAPRED.
Impacto en la costa de California
El Servicio Meteorológico Nacional de Estados Unidos reportó olas de tsunami superiores a un metro en Crescent City, una localidad costera ubicada al norte de California, cerca de la frontera con Oregón.
En Los Ángeles, el organismo meteorológico advirtió sobre una "marejada rápida y destructiva", que provocó cambios súbitos entre la marea baja y la pleamar. "No regrese a zonas inundadas. Las aguas pueden retroceder, pero podrían volver varias veces durante las próximas 24 horas. Además, la primera ola no siempre es la más grande", alertaron las autoridades.
La situación continúa bajo monitoreo internacional mientras persiste el riesgo en todo el anillo de fuego del Pacífico.
