Durante una audiencia semanal en la Plaza de San Pedro, el Papa Francisco generó intriga entre los fieles al atender una llamada telefónica mientras encabezaba el acto.  Aunque el Vaticano no ha emitido ningún comunicado al respecto, este no es el primer incidente en el que el sumo pontífice es interrumpido por su teléfono durante un evento oficial.

En un momento de la catequesis semanal, mientras se realizaba un resumen en varios idiomas, un asistente se acercó al escenario para entregarle el teléfono al Papa Francisco. El acto se desvió momentáneamente de su formalidad, y el hombre a cargo del discurso tuvo que detenerse a petición del asistente papal. 

Esta no es la primera vez que la línea telefónica del Papa se convierte en protagonista durante un evento público. En 2021, durante otra audiencia general, Francisco tomó una llamada después de bendecir a los asistentes, sorprendiendo a muchos al sustituir los saludos y bendiciones por la atención telefónica.

En ambas ocasiones, no se proporcionaron explicaciones oficiales sobre la identidad de la persona al otro lado de la línea. Sin embargo, los fieles fueron tranquilizados y esperaron pacientemente hasta que el Papa regresó para finalizar el encuentro con fotos y bendiciones. 

Ya en abril de 2014, las llamadas telefónicas al Papa se habían convertido en noticia, y la Oficina de Prensa de la Santa Sede aclaró que no estaban relacionadas con su actividad pública ni representaban una posición oficial de la Iglesia. En ese momento, se instó a evitar interpretaciones y a separar los contactos personales del sumo pontífice de su labor religiosa.

Aunque el Vaticano no ha proporcionado detalles sobre la llamada recibida durante la última audiencia, este incidente ha vuelto a llamar la atención sobre la espontaneidad y cercanía de Francisco, quien continúa sorprendiendo a los fieles con su estilo directo y accesible.