El Papa León XIV regresó esta semana al Vaticano luego de pasar 17 días de descanso en Castel Gandolfo, la histórica residencia veraniega ubicada a 38 kilómetros de Roma. Fue su primer retiro como pontífice en el llamado "Segundo Vaticano", un predio de 55 hectáreas junto al lago Albano, reacondicionado durante el pontificado de Francisco.
El pontífice se alojó en la Villa Tiberina, considerada la más confortable del complejo, aunque también utilizó el Palacio Pontificio, hoy convertido en museo. El Papa Francisco, predecesor de León XIV, nunca utilizó el lugar para vacacionar, pero impulsó obras ecológicas en la zona para su recuperación.
Durante su estadía, la tranquilidad fue interrumpida por la crisis en Gaza. Un bombardeo israelí impactó en la Iglesia de la Sagrada Familia, única parroquia católica del enclave palestino, dejando tres refugiados muertos y varios heridos, entre ellos el párroco argentino Gabriel Romanelli, quien sufrió lesiones leves en una pierna. León XIV condenó el hecho y pidió enérgicamente el fin de los ataques contra civiles.
A su regreso al Vaticano, el Papa se enfocó en dos prioridades. Por un lado, la organización del Jubileo de la Juventud 2025, que se celebrará del 28 de julio al 8 de agosto en Roma, y que convocará a miles de jóvenes de todo el mundo. Por otro, los preparativos para reconfigurar su equipo más cercano dentro de la Curia romana.
Se espera que el cardenal Pietro Parolin, actual secretario de Estado y número dos del Vaticano, sea confirmado en su cargo. Sin embargo, hay vacantes clave por cubrir, como la Prefectura de la Congregación para los Obispos, que quedó acéfala tras la elección de Robert Prevost como cardenal. En los pasillos vaticanos hay expectativa por los nuevos nombres que completarán la cúpula de gobierno de la Iglesia.
Además, León XIV mantiene una agenda diplomática activa. Este jueves se reunirá con el presidente de Argelia, Abdelmadjid Tebboune, país natal de San Agustín. Y el sábado recibirá al metropolita Antón, ministro de Asuntos Exteriores del Patriarcado de Moscú, en un intento por recomponer el diálogo con el Patriarca Kiril I, jefe de la Iglesia ortodoxa rusa, tras años de tensiones con el Vaticano.
El Papa prevé regresar a Castel Gandolfo el 15 de agosto, para celebrar allí la tradicional misa de la Asunción y el rezo del Ángelus. Permanecerá dos días en la residencia estival antes de retomar su agenda habitual en Roma.