El devastador terremoto de magnitud 6.0 que azotó el este de Afganistán causó la muerte de 1.411 personas y otras 3.100 resultaron heridas, según el nuevo balance actualizado el martes por el gobierno talibán. El portavoz gubernamental Zabihullah Mujahid indicó además en un comunicado que más de 5.000 casas quedaron destruidas.
"Hoy es el segundo día desde el terremoto, han pasado más de 32 horas, y los heridos siguen llegando", explicó el doctor Sharif Khamosh, del Hospital Regional de Nangarhar, en Jalalabad, la capital de uno de los estados más afectados.
El movimiento sísmico, de magnitud 6,0, ocurrió el domingo a las 23:47 hora local, con epicentro a 27 kilómetros de profundidad, de acuerdo con el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS).
Las zonas más golpeadas
El portavoz del gobierno interino afgano, Zabihullah Mujahid, precisó que la mayor parte de la destrucción se registró en los distritos de Nurgal, Suki, Watapur y Chapa Dara, en la provincia de Kunar. El accidentado relieve de la zona complicó el acceso de los equipos de emergencia, aunque se desplegaron brigadas de rescate y asistencia humanitaria para atender a las víctimas y ayudar a los sobrevivientes atrapados entre los escombros.
La destrucción alcanza viviendas, escuelas y mezquitas, además de tierras agrícolas y ganado, lo que agrava la vulnerabilidad económica de miles de familias rurales.
OCHA, la oficina de coordinación humanitaria de Naciones Unidas, identificó como prioridades inmediatas refugios temporales, agua potable, medicinas y alimentos de emergencia.