Quién es el cardenal Mamberti, el hombre que anunciará al nuevo Papa desde el balcón del Vaticano
Diplomático de perfil bajo y vasta trayectoria, Dominique Mamberti será el encargado de pronunciar el tradicional Habemus Papam, tras la elección del nuevo Pontífice. Su vida, marcada por el servicio diplomático de la Santa Sede, lo ubica hoy en el centro de la escena mundial.

El próximo anuncio del nuevo Pontífice estará a cargo del cardenal Dominique Mamberti, un discreto y experimentado diplomático de la Santa Sede que, a sus 73 años, se prepara para pronunciar una de las frases más emblemáticas del Vaticano: "Annuntio vobis gaudium magnum: Habemus papam!" ("Les anuncio con gran alegría: ¡Tenemos Papa!").

Como cardenal protodiácono, Mamberti ostenta el mayor rango dentro del orden diaconal del Colegio Cardenalicio, lo que lo convierte en el único autorizado para salir al balcón central de la Basílica de San Pedro y anunciar al mundo el nombre del nuevo Papa, así como el nombre que este adoptará para su pontificado.

Se trata de una tradición que se remonta al siglo XV y que, en cada cónclave, capta la atención de millones de fieles y curiosos en todo el planeta.

Nacido el 7 de marzo de 1952 en Marrakech, Marruecos, Mamberti fue ordenado sacerdote en Francia en 1981. Se formó en Ciencias Políticas y Derecho Público, y en 1986 ingresó al servicio diplomático del Vaticano, camino que definiría toda su carrera eclesiástica.

Entre 1986 y 1999, ocupó destinos en Argelia, Chile, la Misión de la Santa Sede ante las Naciones Unidas en Nueva York y en el Líbano. En el año 2000 fue convocado a Roma como consejero de la Secretaría de Estado, especializándose en asuntos multilaterales.

En 2002, fue nombrado nuncio apostólico en Sudán, Eritrea y Somalia. Cuatro años más tarde, el papa Benedicto XVI lo designó como secretario para las Relaciones con los Estados, una función clave desde la que dirigió la política internacional del Vaticano durante un periodo de alta tensión global.

Durante el pontificado de Francisco, con quien mantuvo una relación de cercanía y confianza, Mamberti fue designado en 2014 como prefecto del Tribunal Supremo de la Signatura Apostólica, el máximo órgano judicial de la Iglesia después del Papa. Poco después fue creado cardenal.

Aunque su nombre no figura entre los principales "papables", su sobriedad, perfil institucional y extensa experiencia lo posicionan como una figura influyente y altamente respetada dentro del Colegio Cardenalicio.

El Cónclave comenzó el 7 de mayo, con la participación de 133 cardenales electores menores de 80 años, reunidos en la residencia de Santa Marta, la misma que habitó el papa Francisco. Las votaciones se realizaron en la Capilla Sixtina, bajo estrictas normas de aislamiento.

Durante el proceso, los cardenales no pudieron mantener contacto con el exterior ni acceder a medios de comunicación. El personal auxiliar también debió jurar secreto bajo pena de excomunión, en caso de revelar cualquier detalle del Cónclave.

La primera votación se llevó a cabo ayer. Esta mañana se celebraron otras dos rondas, y recién por la tarde se alzó la esperada fumata blanca. Ahora, con la mirada del mundo puesta en la Plaza San Pedro, se aguarda la aparición de Mamberti para proclamar el nombre del nuevo Sumo Pontífice.